La aeronave Beeccraft King Air 200 con matrícula EC-JJP, volvió ayer a operar entre Islas después de solucionar los contratiempos que le obligaron el pasado lunes a desviar a Lanzarote cuando trasladaba a un bebé de 4 meses enfermo desde Tenerife hasta Madrid.
El avión, propiedad de la empresa Eliance que absorbió a la antigua Urgemer Canarias, realizó hasta seis viajes entre las once de la mañana y las seis y media de la tarde para proceder a los traslados médicos que gestiona el Servicio de Urgencias Canario (SUC), según recoge la web de seguimiento de vuelos FlightRadar24.
Para solucionar el fallo técnico, que según fuentes consultada se debió supuestamente por un despresurización, dos empleados de mantenimiento de la compañía fueron trasladados el pasado martes por el avión reactor que había sido contratado para realizar el traslado del bebé a la Península en sustitución del aparato ya averiado. El Beeccraft King Air 200 «durmió» aquel lunes en el aeropuerto lanzaroteño para, el martes, regresar a su base en Gran Canaria.
Tanto la empresa pública Gestión de Servicios para la Salud y Seguridad en Canarias (GSC), encargada de los vuelos a través del Servicio de Urgencias Canario (SUC), como la propia Eliance han tranquilizado a los sanitarios encargados del servicio de asistencia y transporte sanitario mediante avión medicalizado asegurando que la aeronave es segura y que pasa todos los controles de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).
El avión que opera para el Gobierno de Canarias es un bimotor turbo fabricado en 1981 pensado para vuelos de corta distancia, con autonomía para cubrir rutas de hasta 2.778 kilómetros por hora a una velocidad de hasta 499 kilómetros por hora.
