El Parlamento aprobó ayer la polémica modificación de la ley de cabildos en virtud de la cual los directores insulares y coordinadores técnicos tendrán en adelante la consideración de altos cargos. Es decir, a partir de ahora las personas que ocupen estos puestos podrán ser designadas por criterios meramente políticos, esto es, a dedo.
La proposición de ley, promovida por los grupos del cuatripartito –PSOE, Nueva Canarias, Podemos y Agrupación Socialista Gomera–, con enmiendas conjuntas de todos los grupos y avalada por la Federación Canaria de Islas –la Fecai, la entidad privada que armoniza los intereses de los siete cabildos–, prevé que a los nombramientos no se les aplique el régimen directivo que afecta a los empleados públicos y se homologuen con los de la Comunidad Autónoma. Además, los coordinadores técnicos pasan a llamarse coordinadores insulares a instancias de Ciudadanos.
