El consejero canario de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos, Román Rodríguez, sostuvo este martes en el Parlamento que "la gente" acepta los impuestos y la prestación de los servicios públicos, lo que no acepta es que se robe, "y aquí hay un partido con un currículum impresionante".

Rodríguez hizo esta consideración durante un debate en comisión parlamentaria sobre la conveniencia o no de rebajar los impuestos para contrarrestar la subida de los precios, una medida defendida con carácter general por el diputado del PP Fernando Enseñat y apoyada con carácter puntual por la representante de CC-PNC Rosa Dávila.

El consejero ha garantizado que el Gobierno de Canarias va a mantener la fiscalidad para la financiación de los servicios públicos, las políticas sociales y las ayudas a los sectores económicos.

Pero no ha descartado nuevas "rebajas selectivas" como la aplicada en el descuento del impuesto de carburantes a los sectores profesionales o las ayudas fiscales específicas aplicadas en La Palma.

También ha garantizado que se va a mantener el diferencial fiscal de Canarias con el resto de España y la Unión Europea.

El consejero dijo que la rebaja del IGIC propuesta por la oposición supondría un rebaja en la recaudación de 420 millones de euros, de los que cerca de 250 millones se descontarían de la financiación de los cabildos y los ayuntamientos.

Por eso pidió a PP y CC que consulten con las corporaciones locales e insulares si están de acuerdo con su iniciativa.

El diputado del PP Fernando Enseñat y la diputada de CC-PNC Rosa Dávila coincidieron en acusar al Gobierno de Canarias de estar "hinchándose" a recaudar impuestos.

Rosa Dávila afirmó que el Gobierno de Canarias ha dispuesto de un superávit presupuestario que no ha sabido gestionar a favor de las familias ni de los servicios públicos y defendió que en el contexto inflacionario actual es indispensable que los ciudadanos y las empresas dispongan de más renta.

Su propuesta es una reducción "puntual" del IGIC desde el actual 7% al 5% y la deflactación de las tarifas del IRPF.

Enseñat defendió bajadas generales en todas las figuras impositivas en un momento en que la mayor inflación de las últimas décadas asfixia a familias, trabajadores, autónomos y empresas.

Canarias es la región que encabeza los datos de pobreza y desempleo, mientras su Gobierno "se está hinchando a recaudar impuestos a costa de los canarios que no llegan a final de mes", afirmó Enseñat.

"Le ofrecemos un pacto fiscal para bajar los impuestos", propuso Enseñat, y calificó al Gobierno de Canarias de "cruel, insensible y arrogante con el sufrimiento de los canarios".

Román Rodríguez insistió en que los servicios públicos, las políticas sociales y el apoyo a los sectores productivos se financian gracias a los impuestos y a la justicia tributaria.

Recordó que frente al retroceso de la economía privada con la pandemia, el dinero público es el que ha salvado al sistema productivo con los erte, los créditos ICO, las ayudas directas a las empresas y la financiación adicional de la sanidad y la educación.

Contrapuso las políticas fiscales "progresistas" con las aplicadas en el último año del anterior gobierno de CC, que, con el voto del PP y ASG rebajó el IGIC del 7% al 6,5% en 2019, sin trascendencia para la situación económica de los canarios pero que restó 117 millones de euros a la Comunidad Autónoma, cabildos y ayuntamientos para financiar sus servicios.

Al respecto, el portavoz del PSOE Iñaki Álvaro Lavandera afirmó que aquella bajada de medio punto del IGIC, que fue impuesta por el PP y que CC aceptó a "regañadientes", constituyó "una irresponsabilidad", porque con un beneficio fiscal teórico de 4 euros por habitante y mes dejó más desprotegidos a los colectivos más vulnerables.

Es "el mismo patrón irresponsable de la derecha, que paguen los de abajo para que se lucren los de arriba", resumió Álvaro Lavandera.

Esther González, de Nueva Canarias, constató que "es falso" aquello de que bajar impuestos aumenta la recaudación al generarse más actividad económica: en 2019 se bajó medio punto el IGIC y la recaudación cayó un 7%, aunque la economía creció en un 1,8%.

Manuel Marrero, de Sí Podemos Canarias, atribuyó aquella rebaja del IGIC a que era un año electoral, pero la consecuencia fue dejar el problema para el siguiente gobierno.

Melodie Mendoza, de ASG, que en su momento apoyó la rebaja, admitió que el objetivo de estimular la economía no se cumplió y que el único resultado fue una caída de la recaudación.