El Consejo Rector de Casa África confirmó ayer a José Segura como director general de la institución y consolida así una trayectoria de seguimiento y explicación, en Canarias y hacia el resto del Estado, de la realidad africana en un marco de creciente preocupación por la emergencia política, económica y social de un continente que está en el ojo del huracán del nuevo escenario geopolítico internacional a las puertas del Archipiélago. Segura continuará al frente de Casa África durante tres años más, hasta 2025, tras un periodo de gran actividad desde que tomó posesión del cargo en marzo de 2019 sustituyendo a Luis Padrón. Ayer reafirmó su voluntad de mantener e intensificar esta labor de «diplomacia pública» de dos direcciones, la de enfatizar desde la institución la grave crisis humanitaria que se cierne sobre gran parte del continente vecino, y la de plataforma de proyección de Canarias hacia su entorno geográfico más próximo.
La primera de estas labores de análisis y explicación de la actualidad africana toma mayor relevancia por la situación que vive el continente en la actualidad como consecuencia de los conflictos internos, de la pandemia sanitaria por el covid, de la emergencia climática que se muestra en los países africanos con especial crudeza, y de la guerra en Ucrania, que está intensificando la crisis alimentaria por su dependencia del grano producido en ese país. Casa África ha sido uno de los foros desde donde se ha advertido desde hace ya algunos años sobre la necesidad de la comunidad internacional, y en especial de los países europeos como antiguas potencias colonizadoras, de actuar en todos los ámbitos para frenar los conflictos internos, luchar contra el crecimiento del yihadismo, aplicar programas de ayudas al desarrollo, y contener los movimientos migratorios masivos cuya principal vía de escape es la mortal ruta hacia las costas de Canarias. En lo que va de año el incremento en la llegada de inmigrantes a las Islas es del 27,5%; 2.007 personas cruzaron desde enero el Atlántico desde las costas africanas y, según datos de las oenegés, cada días murieron al menos dos de los los que lo intentaron.
Yihadismo y hambre
Si la situación ya era preocupante desde hace unos meses, sobre todo por los efectos de la pandemia sanitaria en las débiles estructuras económicas del conjunto del continente, el contexto internacional sobrevenido desde la invasión rusa de Ucrania ha disparado las alarmas, como quedó demostrado en la reciente cumbre de la OTAN celebrada en Madrid, que incluyó en el ‘concepto estratégico’ de la organización de defensa un apartado específico sobre el Norte de África, Oriente Próximo y, en especial, el Sahel como amenazas al orden internacional y a la seguridad de los países miembros de la alianza.
Casa África ha tratado de enfatizar su mirada hacia el continente alertando sobre todo este conjunto de elementos que finalmente se traducen en una intensificación del movimiento migratorio hacia Canarias, pero sin olvidar tampoco las otras realidades de los países del entorno del Archipiélago como territorios con múltiples facetas que abren ventanas de oportunidad al desarrollo y a las relaciones económicas, comerciales y culturales entre España, y Canarias de manera singular, con el continente.
Esa mirada es la que ha alimentado la actividad de Casa África en los tres últimos años. Segura presentó ayer al Consejo Rector un informe sobre esa agenda, en la que se constata que durante todo el 2021 y lo que llevamos del presenta año la institución ha organizado más de 860 actos entre exposiciones, reuniones, conferencias, la mayoría de ellas con protagonistas de los países sobre los que centraba cada una de las actividades. «Hemos puesto en valor Casa África como instrumento de diplomacia publica que nos sirve para potenciar las relaciones con el continente africano, mediante contactos con universidades, centros de estudio, colectivos de toda índole de los países de nuestro entorno geográfico», resaltó ayer José Segura.
Una de las prioridades de la institución en este tiempo ha sido la de trasladar la realidad africana en todo su amplia gama de miradas a los escolares canarios a través del programa denominado ‘Enseñar África’, que inicialmente estaba destinado a los alumnos de instituto, pero que en el último curso se ha ampliado a la enseñanza Primaria. Este programa se intensificará en el próximo curso, según explican fuentes de la institución. Al respecto, el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, que ayer presidía el Consejo Rector, subrayó que se trata de «un proyecto magnífico en el que más de 20.000 alumnos y alumnas han conocido esta realidad a través de un magnífico documento bibliográfico, que creo que imprescindible, porque vivimos geográficamente en África».
Torres destacó que la continuidad de Segura al frente de la institución se aprobó por unanimidad del Consejo Rector, en el que están presentes tres representantes del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, él mismo como representante del Gobierno de Canarias, y un representante del ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, resaltando en este sentido el «asombroso trabajo» realizado por el director confirmado.
«Está haciendo un magnífico trabajo, hay que reconocerle su implicación, su motivación, su impulso y que quiera continuar», afirmó Torres. Segura fue nombrado director general de la Casa África el 1 de marzo de 2019 y ayer explicó a los organismos consorciados que, a pesar de circunstancias adversas como la pandemia, la institución realiza de media unas 400 actividades anuales tanto en Canarias y el resto de España, como en el continente africano.
En la reunión intervinieron de manera telemática por parte del Ministerio la directora general de África, Alicia Rico, que actuó en representación del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, acompañada por Ana Martínez, directora general de Diplomacia Económica, y de Carmen Magariños, directora de Cooperación con África y Asia. Por parte de Canarias, además de Torres, participaron la consejera de Economía del Gobierno canario, Elena Máñez, y la concejala delegada de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Maria del Carmen Vargas, en representación al alcalde de la ciudad, Augusto Hidalgo.
Guerra subterránea del Kremlin en Malí
«Existe claramente una estrategia rusa de desalojo frente a Francia y los países europeos y nos enfrentamos a la implementación de una estrategia de influencia que utiliza en particular herramientas informáticas». El general Pascal Ianni, portavoz del Estado Mayor general de los ejércitos franceses, era claro la pasada semana en una entrevista en Franceinfo respecto a la situación de emergencia política que se vive en el Sahel y en especial de Malí, donde desde el Krelim se instiga a la población contra las fuerzas europeas desplegadas en el país desde enero de 2013 con el fin de frenar el avance del yihadismo. Entonces París contaba con el apoyo del gobierno maliense pero no así con la junta militar en el poder desde 2020, que se vale de los mercenarios rusos del grupo Wagner para amplificar la hostilidad. Wagner «tiene claramente el deseo de hacer borrón y cuenta nueva para poder instalarse en una lógica de depredación económica», sostiene Ianni. Francia empezará la salida «ordenada» del país, igual de Alemania, a finales de agosto. «Sabemos que existen vínculos entre esta empresa de mercenarios y la explotación de sitios mineros…». subraya.
