Impulso a la vivienda en Canarias: más de 2.000 casas nuevas en dos años

La combinación de la Administración autonómica y las empresas constructoras posibilitará que en los dos próximos años se construyan más de 2.000 viviendas nuevas para la población más vulnerable y también con un alquiler asequible para aquellas familias de clase media que no pueden acceder a los desorbitados precios del alquiler que hay en el mercado privado.

El consejero de Obras Públicas, Movilidad y Vivienda del Gobierno canario, Pablo Rodríguez, aseguró que se va a ejecutar vivienda “como nunca antes”, al menos en los últimos 15 o 20 años, periodo en el que apenas se han edificado pisos de promoción pública, cuando hay inscritas más de 20.000 familias solicitantes de vivienda en Canarias. Hay prevista una inversión de 664 millones de euros en este periodo.

Las necesidades son de tal calibre que el esfuerzo de los recursos públicos “no es suficiente”, advirtió Rodríguez Valido, por lo que se ha realizado una “apuesta sin precedentes” por la colaboración público-privada de tal forma que los suelos propiedad de la empresa pública Visocan se cederán a la iniciativa privada para que se construyan viviendas en régimen de alquiler asequible en régimen de concesión por 75 años.

El titular de Vivienda estimó que se podrían construir sobre el millar de casas con precios que rondarían entre los 400 y los 500 euros ya que, una vez edificados los inmuebles, es el Gobierno el que gestiona los alquileres.

«Este Gobierno ha realizado una apuesta sin precedentes por la colaboración público privada»

Pablo Rodríguez

— Consejero Obras Públicas

Pablo Rodríguez fue el protagonista del foro organizado por Prensa Ibérica en el Hotel Santa Catalina bajo el título “Liderando la inversión en Canarias: nuevos retos y desafíos en materia de movilidad y vivienda” con el patrocinio de Astican, Construplan, Grupo Newport, Satocan y Ohla. Rodríguez hizo un repaso por las distintas áreas de la Consejería: infraestructura viarias, movilidad y transporte, vivienda y costas. La intervención del titular de Obras Públicas concitó un lleno del aforo con la presencia de miembros del departamento y del Gobierno, empresarios de la construcción, del sector inmobiliario, directivos y profesionales.

El consejero estimó que la política de vivienda en la anterior legislatura fue “poco valiente” porque el Plan de Vivienda 2020-2025 apenas se ejecutó y no se apostó por la colaboración con el sector privado para acelerar el incremento del parque de viviendas. Rodríguez se mostró contrario a la ley estatal de vivienda porque, en su opinión, la solución no es topar los precios del alquiler sino “aumentar la oferta”. En este sentido, el Ejecutivo regional va a dar “confianza” y “seguridad jurídica” a los arrendatarios para que pongan sus viviendas vacías en el mercado.

La movilización prevista de recursos para la vivienda es histórica y sin parangón en las últimas décadas. Del Plan de Vivienda 2020-2025 hay 664 millones de euros de inversión, mientras que de fondos europeos están reservados 252 millones destinados a la rehabilitación de 4.188 viviendas del parque regional de inmuebles.

«El alquiler vacacional se ha desmadrado, habrá viviendas que volverán al mercado»

Por otro lado, en el ámbito del derecho de superficie acordado con el sector de la construcción se prevé movilizar más de 120 millones de euros. Rodríguez reiteró también el ofrecimiento que se ha hecho de seguir adquiriendo viviendas inacabadas ofreciendo a los constructores que las finalicen y después las compra la Comunidad Autónoma. En este sentido, adelantó que en los próximos días mantendrá contactos con representantes de fondos de inversión y bancos propietarios de edificaciones sin acabar para acelerar las gestiones en este aspecto.

Aunque no es competencia de su departamento, Pablo Rodríguez se refirió a la regulación que pretende realizar el Ejecutivo sobre el alquiler vacacional. “El alquiler vacacional se ha desmadrado porque cualquier cosa ya es alquiler vacacional, por ello se va a regular el sector para que tenga la calidad que se les exige a los hoteles y apartamentos y muchas de estas viviendas pasarán al alquiler residencial de larga duración”, añadió.

«La solución no es topar precios sino aumentar la oferta y dar más seguridad jurídica»

El consejero defendió esta modalidad como una alternativa turística que genera economía y puestos de trabajo, pero incidió en la necesidad de regularla ante el desbarajuste actual ya que, subrayó, debe reunir una serie de condiciones al igual que otros establecimientos turísticos. «Hay lugares en donde eso no sucede y esas viviendas deben, sería lo deseable, que volvieran al alquiler de larga temporada», apostilló.

Pablo Rodríguez advirtió que la «prudencia» será uno de los pilares sobre los que discurrirá la gestión del departamento de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad en esta legislatura al ser la Consejería más inversora de la Comunidad Autónoma. Por ello defendió la necesidad de hacer menos anuncios que después no se puedan cumplir y centrarse en la gestión y la ejecución de los fondos con los que se cuenta. Lamentó que el nivel de ejecución del área en el primer semestre del año fuera de un 12% y ahora esté por encima del 40%. «Hay que reducir los objetivos y las prioridades a lo que realmente podamos hacer, por eso hay que ser más prudentes a la hora de planificar», señaló.