En el marco de la celebración del Día de África, el Cabildo de Gran Canaria ha renovado su compromiso con la sostenibilidad y la cultura africana en un encuentro celebrado ayer en la Finca de Osorio, donde tuvo lugar hace ya cinco años una acción de reforestación organizada por el Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM), en el contexto de la exposición El iris de Lucy. Artistas africanas contemporáneas, que se exhibió en 2017 con 25 artistas de 14 países del continente africano, sus archipiélagos y en la diáspora.

Una de las acciones paralelas a la exposición fue la plantación de árboles de distintas especies endémicas de laurisilva, que tuvo lugar el 22 de abril de 2017, en homenaje a la mujer africana y a la figura y el legado de la keniata Wangari Mathai, primera mujer africana que recibió en 2004 el Premio Nobel de la Paz por su defensa del desarrollo sostenible y de los derechos de las mujeres. La acción de reforestación la encabezó una representante de la Fundación Wangari Mathai, Marion Kamau, que viajó a Gran Canaria procedente de Nairobi para liderar esta acción medioambiental con la participación de voluntarias y voluntarios de la Isla, diplomáticos de su país y responsables de Casa África.

Cinco años después, el Cabildo grancanario mostró ayer su respaldo a esta iniciativa en un sencillo y emotivo acto celebrado en esta zona reforestada, en el que participaron la consejera de Cultura, Guacimara Medina; la consejera de Medio Ambiente y Emergencias, Inés Jiménez, y el consejero de Cooperación Institucional y Solidaridad Internacional, Carmelo Ramírez, así como el director del CAAM, Orlando Britto. Al evento se sumó además Teodoro M. Bondyale, secretario de la Federación de Asociaciones Africanas en Canarias, Gina Emanuel, en representación de la Asociación de Mujeres Africanas en Canarias, y Juan Montero, especialista en cultura africana.

Durante el evento, se procedió a la renovación de la placa conmemorativa instalada en 2017 en Osorio, que sigue en pie y se ha convertido en testigo del proceso de crecimiento de todos los árboles plantados que lucen ya entre dos y cuatro metros de alto.