El CAAM libera su ‘Memoria reciente’ con una antología de 151 obras

Cuatro décadas de creación contemporánea de 138 artistas conquistan los espacios del centro cultural

La exposición se podrá visitar hasta el 28 de abril

Exposición ‘Memoria reciente’

Las Islas Canarias reemprenden un cruce de culturas entre cuatro continentes dentro de los espacios del Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM). Como si fuera un ser vivo, las cuatro plantas del edificio se visten con los ropajes del arte contemporáneo, un trabajo confeccionado por 138 artistas de diferente procedencia.

Esculturas que habitan paredes, techos y suelos del edificio ponen de relieve la plasticidad del ego, las complejidades de las identidades humanas y un sinfín de temáticas extraídas de las mismas vísceras del centro museístico. El arte lo copa todo. En total, la muestra de 'Memoria reciente' se compone de 151 obras que se podrán visitar hasta el 28 de abril.

No existe espacio suficiente entre estas líneas que logre expresar todo lo que incluye esta visita, de obligada asistencia en la capital. La larga ristra de piezas que se exhiben deja entrever la increíble capacidad de síntesis que poseen las conservadoras del centro, Mari Carmen Rodríguez, Cristina Déniz y Beatriz Sánchez. Es la misma Mari Carmen Rodríguez, portavoz de las tres profesionales, la que explica que han abordado el proyecto bajo criterios curatoriales que apuntan hacia parámetros visuales, en lugar de la organización por orden cronológico.

"Abordamos temáticas ausentes hasta el momento"

Bajo el estandarte 56 etcéteras abanderados del difunto pintor canario Juan Hidalgo (Gran Canaria, 1927-2018), las profesionales de la galería alegan acerca de la complejidad que ha implicado el proceso de selección. "Abordamos temáticas hasta el momento ausentes dentro de la colección", cuenta Rodríguez. Junto al criterio del conservador Miguel Pons se enfrentaron al reto de elaborar una narrativa revisando las casi 3000 obras almacenadas en los peines del centro. El resultado son nueve secciones separadas por epígrafes temáticos que apelan al pensamiento político e incluso la propia historia de la galería.

La colección expresa distintas manifestaciones de la producción artística actual comprendidas en la rama del arte contemporáneo. Elaborada a través de unos fondos que por su geografía de procedencia apuntan al ámbito del archipiélago canario y a contextos culturales europeos, africanos y latinoamericanos. Un menú que tampoco deja fuera al continente asiático mediante la escultura 100 Chinese hecha en resina de Zhang Dali (China, 1963), emplazada al final del recorrido.

Esta propuesta "de la casa" muestra un grupo de 40 piezas inéditas adquiridas en los últimos cuatro años por la comisión del Cabildo de Gran Canaria, que pasarán a estar expuestas en el Mubea (Museo de Bellas Artes de Gran Canaria), en cuanto abra sus puertas. La consejera de Cultura del Cabildo de Gran Canaria y presidenta del CAAM, Guacimara Medina, destacó que 'Memoria reciente' representa “una excelente relectura museográfica de la Colección CAAM presentada en un contexto especial, ya que el centro conmemora sus 35 años de historia el próximo cuatro de diciembre”.

Itinerario

En esta exposición cada sala se vale de un enfoque diferente. Nada más comenzar la visita se accede a la estancia dedicada a la Identidad atlántica, un preludio de "síntesis" que habla del propio CAAM. Lo más llamativo de este cuarto, ubicado justo en el corazón del edificio, es la imponente figura creada en madera por Francisco Leiro.

Son cuatro obras de gran formato, elaboradas por artistas de Canarias y el resto de Europa, África y América, las encargadas de contar el relato de singularidad 'tricontinental' que nace de la cultura canaria y a la vez cimenta las líneas de trabajo del centro. Modelo y chupacabras (1998) mira al tragaluz central del edificio junto al cuadro Malos pensamientos, (1989-2011) del pintor cubano José Bedia, el tríptico Tramoya (2001) de Cristina Gámez y el lienzo Roots out of the substance of the soul (2017). Algunas de ellas elaboradas dentro de las propias instalaciones del museo.

La visita sigue por Nexos y referentes, el único espacio que se vale de la cronología para establecer su orden interno. Las obras aquí expuestas pertenecen a artistas que influyen y abren nuevas líneas de experimentación. "Se pasa de lo plástico a lo visual", argumentan las conservadoras. Los conceptos y las ideas se abren paso y tratan de acaparar la atención del ojo humano, mientras las piezas compiten por ver cuál es la más creativa.

El buque insignia de esta exposición, 56 etcéteras abanderados (1991) aparece colgado en una de las paredes de esta sala. Una litografía industrial y multicolor elaborada sobre papel que exhibe estandartes de una gran variedad países. Esta obra de arte es la seña de identidad e imagen de portada de la colección: la coexistencia de varios continentes dentro de un mismo espacio. Asimismo, la inclusión del pintor grancanario Juan Hidalgo dentro del esquema expositivo reivindica el importante legado estético que ha influido a artistas canarios de varias generaciones.

Es en este punto cuando se emprende la bajada al 'sótano del edificio'. Al final del primer tramo de las escaleras un retrato pintado por Santiago Ydáñez muestra unas facciones expresivas, con un gesto de pánico. Se llega así al apartado titulado Reflexiones sobre la entidad individual, impregnado por una gran variedad de testimonios visuales que capturan aspectos esenciales de la vida y la identidad del sujeto. Cabe el individualismo, el ego de El vanidoso (2017) de Carlos Nicanor mientras se escucha el taconeo de un tablao flamenco que emerge del vídeo Graph for dance (por alegrías). Si se mira hacia arriba con detenimiento, se puede llegar a atisbar desde lo más profundo del CAAM la escultura de Narciso (2011), ubicada en la última plaza del edificio, una conexión de secciones que une Reflexiones sobre la entidad individual con Desde la historia al presente.

Mediante Desde la historia al presente la mirada se dirige hacia el pasado. Un ejemplo vivo de ello es Storie della vera pittura (2002) de Sigfrido Martín Begué, una obra de arte que narra la historia de la pintura con un estilo llamativo. "Se han traído piezas expuestas en dependencias externas", comentan las conservadoras al admirar esta pieza. El óleo consigue levantar pasiones entre los asistentes a la visita, incluída la consejera del Consistorio isleño, Guacimara Medina.

'Storie della vera pittura' (2002)

'Storie della vera pittura' (2002) / Sigfrido Martín Begué

Desde la historia al presente se viaja a Desde la abstracción hasta el concepto. Comienzan a desfilar por las paredes de una serie de obras impregnadas de geometrías, como lo es el arte modular de Domingo Díaz, La roja/ Aorta (2004), colgado en la entrada al nuevo habitáculo. Sobre cómo se han configurado estos espacios, la conservadora Mari Carmen Rodríguez argumenta que "la obsesión por hacer grupos es necesaria, aunque por sus características otras obras podrían estar en otras secciones".

El recorrido prosigue con el bloque Paisajes naturales y urbanos. Figura la serie fotográfica Riscos inventados (1999) o Aridez (2011) se muestra el compromiso de los artistas con la conservación del medio natural. Reflexiones plásticas de cómo es el medio urbano y cómo evoluciona.

Llegados a la última planta se lee el epígrafe Desde el CAAM. Una sección que viaja al metaverso del museo, con piezas que se han creado in situ. El 'Caamverso' se aprecia especialmente en Dele color al difunto remake II (2019), donde los propios pintores del cuadro aparecen retratados borrando los cuadros de los peines. Una ruptura de la cuarta pared conseguida en la pintura.

Dentro de Imaginario social y ritual están las proyecciones con luces ultravioleta de Las tentaciones de San Antonio (2002), unidas al caballo rojo de Noli me tangere (2009) creado por Marina Vargas. Este apartado trata de mostrar los procesos creativos relacionados con la construcción simbólica, el rito y la espiritualidad.

Las últimas instancias están guardadas para Desde una posición activa, un apartado donde las creaciones ponen patas arriba el orden social, político y económico. Democracia Americana (2021) es quizás el proyecto más vasto, ocupando una sala completa. El trabajo muestra todos los resultados electorales de EE.UU con una serie de lienzos. El fragmento más político y más reivindicativo queda reservado para el final del recorrido.