Música

El Alfredo más íntimo se estrena en el filme ‘Kraus, el último romántico’

El Auditorio Alfredo Kraus acoge la presentación de este documental que se estrena en la Televisión Canaria el jueves 30 de mayo a las 22.00 horas

Martina Andrés

Martina Andrés

Con las olas del Atlántico arropando sus pies, el Auditorio Alfredo Kraus fue ayer testigo del estreno del documental sobre la vida de la gran figura que da nombre a sus cimientos. Kraus, el último romántico, producido por Mediareport -la productora audiovisual de Prensa Ibérica- se ha proyectado durante la tarde del pasado martes en este templo de la cultura en un acto que contó con la presencia de personalidades como el vicepresidente del Gobierno de Canarias, Manuel Domínguez, el viceconsejero de la Presidencia, Alfonso Cabello, el consejero de Educación, Poli Suárez, la consejera de Turismo, Jessica de León, el vicepresidente y consejero de Obras Públicas, Augusto Hidalgo, el concejal de Cultura del Las Palmas de Gran Canaria, Adrián Santana, y la alcaldesa de Las Palmas de Gran Canaria, Carolina Darias.

Los directores de la cinta, Laura Bueno y Germán Roda, fueron los encargados de presentar el documental antes de la proyección. Bueno invitó al público a «disfrutar de una faceta del tenor que solo su entorno más cercano conocía, su faceta de padre y de esposo». «Vamos a ver la vida a través de sus ojos. Damos las gracias a sus cuatro hijos por cedernos estos recuerdos familiares», añadió la directora. Por su parte, Roda se mostró muy entusiasmado por poder «compartir este sueño que se ha hecho realidad» y agradeció su labor a «la gente de Mediareport que siempre nos dieron su confianza para llegar hasta aquí». También habló María Méndez Castro, administradora general de Televisión Canaria, que expresó su orgullo por «poder coproducir el documental y poder impulsar a las producciones canarias». 

La cotidianidad del tenor

Kraus, el último romántico muestra en sus 75 minutos de duración el lado más íntimo del tenor canario que fue, en palabras de su hija Rosa Kraus, un artista que siempre guardó «muy celosamente» su vida privada y su intimidad. 

En este rasgo del tenor reside, según su hija, el éxito de la felicidad, en «separar la carrera artística de la vida privada». 

Ahora, en el año en el que se cumplen 25 años de su muerte (Alfredo Kraus falleció en septiembre de 1999), el documental llega al Auditorio (y al salón de todos los canarios y canarias el próximo jueves 30 de mayo a las 22.00 horas en Televisión Canaria) para arrojar esos retazos de cotidianidad que quedaron diluidos en la figura del gran tenor que fue Kraus, que además de artista y un gran profesional, también fue un padre para el que «su esposa y sus hijos eran lo más importante», tal y como relata su hija. 

El documental que cuenta la vida del tenor está dividido en cuatro actos en los que se alternan vídeos caseros que grabó el propio Kraus con su cámara de súper 8, entrevistas a sus cuatro hijos -Rosa, Alfredo, Patricia y Laura- o intervenciones de sus amigos más cercanos, material que muestra el lado más cariñoso y bromista del artista grancanario considerado como una de las mayores figuras de la lírica de la última mitad del siglo pasado.

Kraus cultivó una carrera profesional muy longeva, así como también lo fue su historia de amor con su mujer y madre de sus hijos, Rosa Blanca Ley-Byrd. La relación entre ambos duró más de cuatro décadas, tiempo en el que compartieron alegrías, éxitos, tristezas y muchos viajes. El 7 de octubre de 1956 fue cuando la pareja contrajo matrimonio, momento en el que Kraus tenía 28 años. 

La historia de amor

«Cuando descubrí su maravillosa historia de amor con Rosa Ley-Byrd decidí que ese era el argumento que quería contar», explica Laura Bueno en un avance a este periódico.«Rosa fue imprescindible para él, recorrió el mundo con el tenor en viajes que duraban meses», añade.

«Mi padre se lo tuvo que currar mucho para conquistarla, mi madre no estuvo por la labor, en esa época no le interesaba la música. Mi padre fue con amigos a hacerle alguna serenata al balcón y ella le decía a su hermana: ‘asómate tú, que yo no quiero verlo’», cuenta durante el filme Rosa Kraus haciendo alusión a la época en la que sus padres se conocieron en Las Palmas de Gran Canaria, ella con 16 años y su padre con 20 o 21.

Alfredo Kraus y Rosa Ley-Bird estuvieron juntos hasta la muerte de ella, el 5 de septiembre de 1997. El tenor falleció dos años después en Madrid, tras sumergirse en la profunda tristeza a la que le llevó la pérdida de su mujer. 

Anécdotas de su vida juntos se entrelazan con las de la carrera profesional del tenor a través de las voces de sus hijos y de amigos como Alfredo Matallana o Eduardo Lucas, entre muchos otros. 

Los comienzos

Así, se hace alusión a sus comienzos, desde su nacimiento en Las Palmas de Gran Canaria el 24 de noviembre de 1927, fruto del matrimonio entre Josefina Trujilo Mújica y Otto Kraus hasta sus primeros pasos y éxitos en el mundo de la música. 

Fue en 1931 cuando Kraus inició sus estudios musicales, cuando, con tan solo cuatro años, comenzó a recibir clases de piano. En 1935 se incorporó al coro de los misioneros claretianos de su ciudad y, tras pasar por la Escuela de Peritos Industriales con 18 años y marcharse años después a Barcelona a recibir clases de canto, el 10 de diciembre de 1954 ofrece su primer concierto en el Teatro Pérez Galdós de Las Palmas de Gran Canaria. 

Otro hito relevante en su carrera fue la interpretación de Tosca (de Puccini) en el Teatro Real de El Cairo, interpretación que le dará el impulso suficiente para catapultarse internacionalmente como tenor y convertirse en la figura de relevancia que fue y es hasta el día de hoy, un referente del bel canto con una técnica vocal «insuperable», en palabras de su otorrino y amigo Eduardo Lucas. 

Un padre de familia y un marido entregado al que ahora se le puede ver cenando junto a su mujer en una mesa de mantel con cuadros rojos y blancos, grabando su reflejo frente a un pequeño espejo o paseando por París.