Resolutivo y bendito. Pero también cuestionado. Un artillero en el ojo del huracán. Bigoleador y héroe en Chapín, Macauley Macky Chrisantus (Kaduna, Nigeria, 20-8-1990) ha vuelto a sonreír. Computa nueve dianas en la competición liguera y rescató a la UD el pasado sábado ante el colista Xerez. Tras 1.671 minutos [en 34 partidos, 15 de titular], el nigeriano luce el mejor promedio ofensivo del arsenal de Lobera: 1 tanto cada 185 minutos. Es la venganza fría de un soldado señalado por el último tropiezo ante el Hércules (0-0), en el estadio de Gran Canaria -tras malograr una ocasión franca ante Falcón-.

Declarado como un guerrero insaciable, por su infancia en el cuartel militar de Kaduna, Chrisantus es más efectivo que Vitolo, el isleño lleva 12 goles en 2.815 minutos (promedia uno cada 234 minutos), e incluso más letal que Thievy Bifouma, el galo contabiliza nueve en 2.580 (que significa uno cada 286 minutos de competición).

La buena estrella de Chrisantus es garantía de éxito. Ha marcado en siete partidos y solo se perdió en uno: ante el Alcorcón y en Santo Domingo por (3-1). De los otros seis partidos que llevan su firma de pólvora, la UD arrancó cinco victorias y un empate. En total, la entrega del combatiente de Kaduna por la causa amarilla se traduce en 16 puntos. Con dos tardes para el recuerdo como los dobletes logrados ante Guadalajara en el Pedro Escartín -27 de octubre- y el pasado domingo ante el Xerez en el Municipal de Chapín como avales, el nigeriano solo ha logrado un gol en el Gran Canaria y fue ante el Huesca en la goleada (4-0), dentro de la disputa de la 17ª jornada.

Macky, que se coronó en el Mundial sub-17 de Corea del Sur con el combinado de Nigeria y además fue premiado con la Bota de Oro, firmó por la UD el 26 de julio. Tras las salidas de Mauro Quiroga y Javier Portillo, Lobera tenía a su hombre gol. Un completo desconocido. El atacante de 1,83 metros se desvinculó del Hamburgo, club que le cedió en la 2011-12 al Frankfurt, de la Segunda división alemana, para buscar fortuna.

Y el primer día en la oficina fue prometedor. Con solo 22 años, el africano debutaba de amarillo ante el Racing -en la primera jornada- y lo hacía a lo grande. Un gol y tres puntos. El ´9´ amarillo tuvo un estreno perfecto. En El Sardinero, un centro al corazón del área de Vitolo fue rematado de forma ajustada por el primer goleador del curso liguero de la ilusión.

Pero llegó la debacle. La era de las tinieblas. Los amarillos encadenaron ocho jornadas sin vencer. Con Lobera al borde del precipicio, Chrisantus perdió su condición de titular. Thievy y Javi Guerrero le comieron el terreno. En ese peregrinaje, ante el Barça B y en la séptima jornada, en plena caída libre, salvó los muebles en el Mini Estadi. Un balón de Momo, desde el costado derecho, fue rematado de cabeza a la red . Una obra de arte.

En la undécima jornada, y en el Pedro Escartín de Guadalajara, Macky incendió el duelo con dos tantos en apenas veinte minutos. Entró con el 2-1 para los alcarreños, y de forma inmediata, tras recibir un pase de Deivid, fusiló al meta Toño. Siete minutos después, para redondear un cuarto de hora sublime, recogió un rechace de un disparo de Thievy en el (2-3). Era la segunda victoria consecutiva de la nueva UD, un equipo lanzado en un despertar que duró tres meses.

De ser colista en el descanso del Pedro Escartín, con la derrota momentánea, al cielo de la tabla. Y parte de ese mérito reside en el olfato y acierto de Macky.

Pero la efectividad del soldado de Kaduna coincidió con un Javi Guerrero pletórico. El madrileño, que anotó en cinco jornadas de forma consecutiva [de la 10 a la 14], y la velocidad de Thievy se hicieron los amos de un eje ofensivo abonado a la gloria. Torrente de éxitos. Macky volvería a llamar a la puerta. Fue en la jornada 17 (8 de diciembre) y ante el Huesca para participar en la goleada (4-0) en el Gran Canaria. Fue su primer tanto en el partenón amarillo y el cuarto tras salir del banquillo. Un saque de esquina de Momo fue rematado con la cabeza a la red.

En la jornada 25, y ante el Alcorcón, saltó a escena en el tramo final para maquillar el sonrojo. Hizo el definitivo (3-1) en su sexto tanto en Liga, al aprovechar el despeje del meta Manu a un tiro de Thievy.

Con el paso de la segunda vuelta, y con la UD en puestos de promoción, el binomio Thievy-Macky se convirtió en la fórmula ideal. Las continuas lesiones de Guerrero le dejaron fuera de combate. Y fue el galo el que cedió para Macky en la acción del 0-2 ante el Almería en los Juegos del Mediterráneo. En esa jornada, los amarillos ganaron gracias a un tanto agónico del central Murillo en el minuto 94.

Y hace tres días, gracias a las asistencias de Momo y Tato, en dos contragolpes de libro, Macky engordó su cuenta. Dos genialidades de hombre de área. Nueve dianas en 1.671 minutos y 16 puntos para estirar el sueño del ascenso.

En la película de esta Liga, Macky tuvo una aparición fundamental en el UD-Racing de la tercera ronda de Copa. Con el 1-2 en el marcador, en el último suspiro, el jugador nigeriano fue derribado en el área de Mario y Momo forzó la prórroga. Los amarillos lucieron su mejor versión y aplastaron al Racing.

Desde ese 18 de octubre, la UD deslumbra por su serenidad y apunta al paraíso de Primera. En Copa, Macky sumó un gol, el que logró ante el Betis en la ida de los octavos y dio con la fórmula bendita para la escalada. Especializado en misiones de riesgo, Chrisantus aparece en el instante preciso. Fe eterna en el soldado de Kaduna. "Aún falta lo mejor", advierte.