Samuel Carmona mantiene su marca inmaculada dentro del profesionalismo, en el que acaba de aterrizar después de una fructífera carrera como amateur. El grancanario saldó con victoria su tercer combate. Se impuso en Siberia, Rusia, al experimentado boxeador filipino Enrique Magsalin, que afrontaba su undécima pelea profesional. El púgil isleño, que fue olímpico en Río 2016, siempre se mostró superior a su rival. Le venció claramente a los puntos en este combate pactado a ocho asaltos. Carmona firmó una actuación que le dejaba a él y a su preparador, Carlos Formento, con un muy buen sabor de boca.