En su momento más dulce de la temporada, y con la consecución del título de la Copa del Rey todavía fresco en la memoria, el Guaguas afronta hoy un nuevo examen en el choque que le mide al Teruel en la Superliga Masculina de voleibol, en un duelo que va a resultar clave en la carrera de ambos favoritos al título por ser primeros de la liga regular.
El conjunto amarillo, en la campaña de su vuelta a la competición cogiendo el testigo décadas después de un proyecto campeón, no defrauda. Dirigido por el mito Sergio Miguel Camarero, la escuadra isleña se muestra intratable con una plantilla de calidad infinita hombre por hombre, y que a nivel de grupo en apenas unos meses ha conseguido formar un bloque sólido, sin fisuras.
Pero según uno de sus jugadores importantes, el estadounidense Matt Knigge, todavía no se ha tocado techo. “Creo que este Guaguas aún tiene margen de mejora”, apunta el central, quien reconoce que está jugando “el mejor vóley de mi carrera”.
El mejor jugador en su posición de la Superliga Masculina la temporada pasada, formando con el Emevé de Lugo durante su primera experiencia en España tras pasar un año en Alemania, va camino de renovar esta distinción -ya figura segundo en el ránking- .
En cuanto al duelo de hoy frente al líder Teruel, Matt Knigge, uno de los más jóvenes de la plantilla, reconoce que tienen una oportunidad de revancha para resarcirse de la derrota que encajaron en la primera vuelta en feudo turolense. Considera que este choque será muy diferente: “En aquel partido estábamos recién salidos de la cuarentena por el brote de Covid que tuvimos, y llegábamos algo faltos de rodaje”.
A sus 24 años, su rendimiento ha crecido a pasos agigantados en los tres años que lleva como jugador profesional. Reconoce que sigue “aprendiendo” cada día de sus compañeros de posición más veteranos del Guaguas. Tres veces integrante del equipo ideal en lo que se lleva de la competición liguera, se siente halagado por esta distinción pero antepone “el rendimiento del grupo” a estos reconocimientos personales.
Matt Knigge atribuye los éxitos del Guaguas a la fortaleza y la unidad del plantel: “Aunque jugamos juntos desde hace solo unos meses al ser una plantilla nueva en su totalidad, parece que llevamos haciéndolo cinco años”.
Califica de “increíble” la victoria en la Copa del Rey, su primer título profesional. Apunta que la competencia sana que existe dentro el grupo propicia que “cada entrenamiento sea como si jugáramos un partido”. Señala que la plantilla es una piña “y esto hace que en la pista sienta que el que tengo al lado lo da todo como yo por el mismo objetivo”. “Es algo que desde fuera no se nota, pero dentro lo agradeces y lo valoras”, añade.
