Kai Robert Mikaelsen (Gjøvik, 1973) es consejero delegado de Servatur, histórico proyecto turístico canario que desde junio comparte al 50% con Ivar Tollefsen, capitán del gigante inmobiliario nórdico y europeo Fredensborg AS. A pesar del momento que atraviesa el sector alojativo, en su mente no está sino la expansión, y de ahí su decidida apuesta por hacerse con el Beverly Park. Además, aplaude el modo en que Canarias afronta esta pandemia.
El Hotel Beverly Park, en El Veril, era el único activo alojativo que los Ruiz-Mateos –a través de Hotasa– tenían en Gran Canaria cuando saltó la estafa de Nueva Rumasa. El largo pleito desveló que el emporio familiar ni siquiera tenía la solvencia necesaria para adquirirlo. La entrada en concurso de acreedores dejó poco margen de maniobra en estos años. Cuando el cero turístico al que obligó la pandemia llevó al cierre, los administradores se pusieron manos a la obra para organizar la subasta que ahora se cierra.
Han presentado la mejor oferta para hacerse con el Beverly Park. ¿De cuánto dinero estamos hablando?
Un precio alto.
Es público que a la primera ronda concurrieron con 42 millones de euros. ¿Subieron mucho más?
Mi socio [la inmobiliaria Fredensborg AS que capitanea el también noruego Ivar Tollefsen] me ha pedido que no revele el precio exacto, pero piense que nosotros hemos superado en más de cinco millones los 51 que ha ofrecido el segundo.
Eso para hacerse con el inmueble. ¿Habrá además otra inversión para renovarlo?
Invertiremos entre 20 y 25 millones de euros para que las tres estrellas actuales se conviertan en cuatro. Ese es nuestro plan. Estamos estudiando si los apartamentos que hay a pie de playa los integramos en el conjunto o los mantenemos separados.
¿Qué objetivo persigue Servatur? Estaban muy centrados en Mogán, hace seis años se hizo con el Waikiki de Playa del Inglés y ahora vuelven a invertir. ¿Hacia dónde caminan?
Tenemos el foco en Gran Canaria, pero estamos presentes en otras islas y no descartamos otros destinos como Baleares. Eso sí, cualquier decisión futura no afectará a mantener aquí nuestro centro de operaciones. Me pregunta por nuestros planes y se los cuantifico. Entramos en 2020 con 2.100 unidades alojativas y podemos terminarlo con 4.000. En cinco o siete años queremos tener ya 10.000, y en diez o doce, alcanzar las 25.000. En definitiva, queremos situarnos entre los tres primeros grupos hoteleros de España y sin renunciar nunca a ser los primeros.
Un factor externo como el coronavirus nos ha demostrado que el turismo también puede sufrir serios golpes. ¿Por qué esta apuesta inversora de Servatur justo en este momento?
Es muy difícil encontrar oportunidades como esta del Beverly Park y estoy feliz por que haya ocurrido. El contexto al que hace referencia sería un problema si se tratara de inversiones a corto plazo, pero nosotros miramos mucho más allá. En seis meses, o puede que en un año, o en catorce meses, recuperaremos la normalidad y la gente comenzará a viajar más y más. Me remito a la anterior respuesta, tenemos un camino trazado para ser uno de los principales operadores del sector en España, no podemos ni queremos mirar solo al presente.
Fredensborg AS entró en junio y van al 50% en Servatur. ¿En qué medida un nuevo socio como Tollefsen acerca la posibilidad de que esos planes que describe se hagan realidad?
Para que se haga una idea, nuestro partner maneja activos en el sector del Real Estate por valor de 15.000 millones de euros. Fredensborg AS es la tercera inmobiliaria de Europa. Por supuesto es líder en Noruega, Suecia, Dinamarca y también en la República Checa. Tiene en propiedad y gestiona más de 140.000 bienes inmuebles en toda Europa y su objetivo es alcanzar un millón. Dicho esto, Servatur es la punta de lanza de este gigante en España.
“El regreso de TUI es muy buena noticia, la salud del negocio pasa por el retorno de los turoperadores”
El mercado nórdico fue tradicionalmente el principal para Servatur. ¿El abanico se ha abierto de manera definitiva?
Sigue siendo el mercado más importante. Es innegable que en nuestra trayectoria los apartamentos en Puerto Rico (Mogán) que tanto gustaban a los nórdicos eran una seña de identidad de la empresa, pero esa dedicación casi exclusiva ha dejado de existir. Han pasado ya seis años desde que compramos el hotel Waikiki de Playa del Inglés y su clientela era y sigue siendo principalmente alemana. Ya tenemos partners en todos los principales países de Europa. Ingleses, canarios, alemanes, españoles, polacos..., nos dirigimos a todos ellos para ser su operador preferido.
TUI vuelve a las Islas. ¿Qué importancia tiene que los turoperadores tomen la iniciativa?
Es realmente muy importante, porque la buena marcha del negocio alojativo, incluida la de nuestra empresa, pasa por que los turoperadores retomen la actividad. Indudablemente se trata de una muy buena noticia, no hay duda.
Canarias siempre ha defendido la conveniencia de hacer test en origen para compatibilizar el control de la pandemia y la actividad turística. ¿Qué opinión tiene al respecto?
En primer lugar le diré que en dos años todo esto estará olvidado. Pero en el momento presente está claro que Canarias es consciente de lo que se juega y lo está haciendo realmente bien al defender el uso de esos elementos que menciona. Es necesario tener un control de los viajeros, de su temperatura, de su salud, es muy importante para que la actividad alojativa pueda continuar como antes de surgir el problema. Se están tomando las medidas adecuadas por parte del conjunto de las administraciones, desde el Gobierno central pasando por el de la comunidad autónoma, los cabildos y los ayuntamientos. Hay mucho en juego y se nota que aquí nadie quiere confundirse ni meter la pata, porque lo que tienen entre manos es vital. Se lo están tomando realmente en serio.
