La resistencia de la industria hotelera está al límite. Y no solo la de las firmas más modestas, sino también la de las grandes cadenas nacionales. La falta de liquidez tras casi un año sin huéspedes obliga a las empresas a poner en el mercado parte de su cartera. Se trata de hacer algo de caja con la esperanza de que sea suficiente para capear lo que quede de la tormenta. El caso más reciente es el de Riu, que ha sacado a la venta el Paraíso Lanzarote Resort, su único complejo hotelero en la isla de los volcanes. El traspaso de este cuatro estrellas todo incluido de 598 habitaciones, ubicado en la playa de los Pocillos, en la localidad de Puerto del Carmen, supondría así la retirada de Riu Hotels & Resorts de Lanzarote. Con todo, este movimiento de la multinacional con sede en Palma de Mallorca –socia estratégica del gigante alemán TUI, hasta el punto de que son prácticamente la misma cosa– es el último pero no la excepción. Los anuncios de hoteles en venta no dejan de crecer en las últimas semanas, especialmente en determinadas localidades.

Ya son unos 150 los alojamientos turísticos a la venta en la Comunidad Autónoma

Si a finales de diciembre había algo más de un centenar de establecimientos a la venta, la cifra ya va camino de los 150. No solo pequeños hoteles o apartamentos. Hay hasta 22 alojamientos turísticos en el mercado con un precio mínimo de cinco millones de euros. Inmuebles que implican gastos fijos para evitar su deterioro que están asfixiando a las empresas. En Playa del Inglés, en Gran Canaria, es donde está la mayoría de los grandes hoteles en venta, un total de nueve, y también donde está el más caro: un establecimiento con 185 habitaciones que se traspasa por 31 millones.

Riu también quiere traspasar otros dos establecimientos de la cadena en Madeira y Panamá

En este escenario, Riu ha decidido poner a la venta no solo el Paraíso Lanzarote Resort, como confirmaron ayer desde la hotelera, sino también otros dos establecimientos de la cadena en Portugal y Panamá. Suman 1.500 habitaciones. Otros emblemas del sector, como Iberostar –que ha cedido el papel de principal patrocinador del Club Baloncesto Canarias en favor de la tecnológica Lenovo–, NH –que también negocia la venta de determinados activos– o Barceló –que acaba de traspasar el hotel Formentor–, también exploran vías para ganar liquidez.