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Cambio radical en el pago mensual del paro: a partir de ahora será así

La situación en España para las personas desempleadas está experimentando cambios significativos

Malas noticias para los que cobran el paro en España: cambia la forma de cobro

Archivo - Varias personas pasan por delante de una oficina del Servicio Público de Empleo Estatal (Sepe), a 2 de junio de 2022

Archivo - Varias personas pasan por delante de una oficina del Servicio Público de Empleo Estatal (Sepe), a 2 de junio de 2022 / Carlos Luján - Europa Press - Archivo

La situación en España para las personas desempleadas está experimentando cambios significativos en los últimos meses. Con más de 1.7 millones de beneficiarios de la prestación por desempleo en España, es vital comprender a fondo el impacto de las recientes reformas del actual Gobierno en materia laboral en aquellos que dependen de estos apoyos económicos. Así, en un acuerdo estratégico con la Unión Europea, el Gobierno ha decidido reconfigurar la asignación de la prestación por desempleo, con la intención de fomentar activamente la búsqueda de empleo entre la población desempleada del país.

La prestación por desempleo en España, actualmente fijada en el 80% del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), aproximadamente 480 euros al mes en 2023 después de agotar la prestación contributiva, experimentará una cambio en la forma en que se distribuye. Bajo el nuevo sistema de pago, los desempleados recibirán una cantidad más sustancial al principio, decreciendo progresivamente con el tiempo. Esta medida tiene como principal objetivo estimular a los beneficiarios a emprender una búsqueda activa de empleo.

Novedad en las prestaciones por desempleo

Una novedad a destacar en esta nueva reforma es la posibilidad de que los desempleados en España continúen recibiendo dicha prestación mientras trabajan, inclusive a tiempo completo, actuando como un complemento salarial. Sin embargo, esta modalidad conlleva ajustes en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), dado que los ingresos provienen de dos fuentes distintas: el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) y el empleador.

Este modelo, adoptado en otros países europeos y respaldado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), tiene como finalidad incentivar a los desempleados a reintegrarse en el mercado laboral.

La alternativa al paro

En el escenario para aquellos que no consigan empleo, el Ingreso Mínimo Vital (IMV) emerge como una alternativa relevante. Este programa de la Seguridad Social garantiza un ingreso mínimo para los grupos más vulnerables, ofreciendo apoyo a aquellos que enfrentan dificultades para reincorporarse al mercado laboral. Los umbrales de ingresos varían según el tipo de familia, siendo necesario demostrar vulnerabilidad económica.

Estos cambios representan un paso trascendental en la estrategia económica de España, buscando equilibrar el respaldo financiero a los desempleados con la motivación para una reinserción efectiva en el ámbito laboral. Es esencial que los beneficiarios se mantengan informados y planifiquen de manera proactiva, ya que estas adaptaciones pueden tener un impacto significativo en su situación financiera y profesional.