Aerolíneas

Los Hidalgo (Air Europa) pactan con Iberia quedarse con los 180 millones de Venezuela si logran cobrarlos tras la compra

La aerolínea de Globalia aún no ha recuperado el dinero inmovilizado por Caracas, objetivo para el que contrató en 2019 como mediador a Víctor de Aldama, el cerebro de la ‘trama Koldo’

El Gobierno de Maduro ofreció saldar la deuda con petróleo o con hoteles, pero la familia Hidalgo insiste en cobrar en efectivo e incluyó una cláusula en el acuerdo de venta con IAG para mantener sus derechos sobre ese dinero también tras la operación

Aviones de Iberia y de Air Europa en el aeropuerto de Madrid-Barajas.

Aviones de Iberia y de Air Europa en el aeropuerto de Madrid-Barajas. / EP

Cristina Gallardo / David Page

Air Europa arrastra desde hace casi una década un agujero millonario por sus operaciones en Venezuela. El Gobierno venezolano mantiene bloqueados unos 200 millones de dólares (unos 180 millones de euros al cambio actual) procedentes de ventas de billetes en el país y que la aerolínea española no puede repatriar por las restricciones impuestas por las autoridades locales.

Air Europa contrató en 2019 como mediador con las autoridades del país caribeño para intentar cobrar esa deuda al empresario Víctor de Aldama, imputado como comisionista clave y contacto con el Ministerio de Transportes en la denominada ‘trama Koldo’ de compra de mascarillas en plena pandemia de covid. Lo hizo a razón de 10.000 euros al mes, que facturaba a través de su empresa MTM 180 como servicios de asesoría al grupo Globalia, matriz de Air Europa.

Fuentes conocedoras de la negociación aseguran que la aerolínea sigue sin cobrar ese dinero de Venezuela y ven más que improbable que consiga recuperarlo. Hasta el momento, las autoridades venezolanas han ofrecido a la compañía española una compensación mediante el pago con criptomonedas, con petróleo, e incluso mediante la cesión de la propiedad de activos hoteleros en manos del Estado venezolano en destinos turísticos como Isla Margarita, pero ninguna de estas opciones satisface a la compañía aérea española, que no las ha aceptado. Los actuales propietarios de Air Europa siguen haciendo gestiones con el Gobierno de Caracas para intentar recuperar el dinero bloqueado a través de abogados y de su representante legal en el país.

Cláusula en el contrato con IAG

La familia Hidalgo, propietaria del grupo turístico Globalia, ha pactado con el IAG -el holding aéreo propietario de Iberia, Vueling y British Airways- la venta de Air Europa y ahora están a la espera de la autorización de la Comisión Europea. Los Hidalgo han incluido una cláusula en los dos contratos de venta firmados con IAG -tanto en el de 2019 como en el del año pasado- en la que se reservan el derecho de cobro de esos 180 millones bloqueados en Venezuela si se consiguiera recuperarlos tras la venta de Air Europa, según confirman a El Periódico de España, del mismo grupo editorial, fuentes conocedoras de la situación. Fuentes oficiales de IAG y de Air Europa declinaron hacer comentarios sobre esta información.

El problema con las repatriaciones de fondos por parte de compañías internacionales presentes en Venezuela empezó a gestarse ya en 2003. Ese año el Gobierno de Hugo Chávez aprobó un estricto control de cambio de divisas, y las empresas extranjeras que realizaban sus operaciones en bolívares, la moneda local, y querían repatriar sus ingresos en dólares a sus países de origen tenían que hacerlo al cambio impuesto por el Estado venezolano y recibir una autorización explícita de las autoridades del país.

El sistema fue funcionando durante años, y para las aerolíneas extranjeras con vuelos en el país el país era una práctica habitual y obligada: vendían sus billetes en bolívares y repatriaban los ingresos en dólares aplicando el tipo de cambio oficial, no siempre ventajoso. En 2012, sin embargo, el Gobierno chavista empezó a tener problemas para cumplir con sus obligaciones de pago en divisas, y empezó a acumular retrasos en las autorizaciones de las repatriaciones del dinero de las compañías aéreas, hasta prácticamente suspenderse por completo.

Una suerte de default selectivo que llevó a muchas aerolíneas internacionales a suspender sus vuelos en Venezuela o a dejar de vender billetes en el país (para sortear el pago en bolívares) y hacerlo sólo en otros estados. Eso es lo que hizo Air Europa y también Iberia, que igualmente llegó a acumular una deuda millonaria retenida en Venezuela.

Contacto en la inauguración de un hotel

Por lo que respecta a De Aldama, las mismas fuentes señalan que los directivos de Globalia conocieron al empresario hoy investigado en la Audiencia Nacional durante la inauguración en 2018 de un hotel en México, y que tras algunas colaboraciones firmaron un contrato para que sirviera de intermediario en el asunto del dinero de Venezuela. La carta-mandato -que está a disposición de los investigadores de la trama- especificaba los límites de gestión del empresario a la hora de dirigirse a la otra parte en conflicto.

Por otra parte, en el informe de la Oficina Nacional de Inspección del Fraude (ONIF) que analiza la situación fiscal del 'lobbista" y el cobro de los 10.000 euros mensuales que le pagaba Globalia, se vincula el inicio de la 'trama Koldo' con el préstamo obtenido por Air Europa por parte del Gobierno para evitar su quiebra en lo peor de la pandemia de covid. Apunta concretamente que la operación de las mascarillas se fraguó durante las negociaciones llevadas a cabo en 2020 en el Ministerio de Transportes para rescatar la aerolínea.

Air Europa acabó recibiendo un préstamo de 140 millones de euros avalado por el Instituto de Crédito Oficial (ICO) y ayudas por 475 millones a través del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas (repartidas en un préstamo ordinario de 235 millones y un préstamo participativo de 240 millones). En total, la inyección percibida por la compañía con dinero público ascendio a 615 millones de euros.

"Su cercanía con determinados funcionarios [el ex asesor del ministro Ábalos, Koldo García Izaguirre] y sobre todo, la coincidencia temporal (marzo de 2020) propició el ofrecimiento de las mascarillas, de su transporte y de su precio y la aceptación por el Ministerio", destaca el inspector de Hacienda encargado de redactar el informe.

En otra parte del informe, se alude a la presencia de De Aldama en el aeropuerto de Barajas el 20 de enero durante la madrugada del 20 de enero de 2020, cuando la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, hizo escala en Madrid durante un viaje hacia Turquía y mantuvo un encuentro con Ábalos. "No deja de ser sorprendente que se haya publicado sobre la presencia del propio señor Víctor de Aldama en el aeropuerto en el mismo día del denominado ‘Delcygate", señala el informe que obra en la causa.