El campo canario exporta un 53% menos que hace veinte años

El huerto canario no pasa por su mejor momento. Las exportaciones del sector primario del Archipiélago tampoco. En 2023, el valor de los envíos de frutas, verduras, carne y pescado con origen en las Islas rozaron los 100 millones de euros. Una cifra que si se echa la vista atrás y se compara con las que se registró hace veinte años evidencia las dificultades que está pasando el sector. En concreto, las exportaciones agroalimentarias han caído un 53% en dos décadas.

La entrada en Europa de productos cultivados en terceros países -que buena parte del sector considera competencia desleal al no tener los mismos controles que a ellos se les exigen- y los excesivos costes dificultan cada vez más que los productos canarios lleguen a los mercados de fuera de España. En 2003, de acuerdo con los datos ofrecidos por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, el valor de las exportaciones agrarias y pesqueras del Archipiélago fue de 216,6 millones de euros. El año pasado la cifra cayó hasta los 99,7 millones, el valor más bajo desde que existen registros. Un análisis pormenorizados de la estadística permite ver que los productos más afectados por esta caída son precisamente las frutas, verduras y hortalizas, cuyo valor en exportaciones ha descendido un 87% en los últimos veinte años. De esta manera, los agricultores isleños han perdido por el camino 141 millones de euros.

Además de los productos hortofrutícolas otros de los que han sufrido una debacle en sus exportaciones son los lácteos y los huevos que han caído un 79% desde 2003. Si en aquel momento el valor de los envíos fuera de Canarias era de 24,3 millones de euros el año pasado apenas superó los 5 millones.

Sin embargo, otros productos del sector primario sí que han salido beneficiados en estos años aunque ninguno con el músculo suficiente para poder contrarrestar la caída experimentada en el sector hortofrutícola canario. Este ha sido el caso de los pesqueros, cuyas exportaciones pasan de 28 a 52,1 millones de euros. También crecen las vinculadas a la carne, que a principios de siglo apenas superaban el medio millón de euros y ahora alcanzan los 6,6 millones. Además, suman la exportación de cereales y la de azúcar, café y cacao.

Buen momento a nivel nacional

La agonía en las exportaciones agrarias Canarias coincide además con el momento dulce que se vive a nivel nacional. El Ministerio de Agricultura informó recientemente de que las exportaciones agroalimentarias y pesqueras del conjunto del país alcanzaron el año pasado su cifra récord sobrepasando los 70.400 millones de euros. Una cantidad que no solo supone un 3% más que en el ejercicio anterior, sino que supusieron el 18,4% del conjunto de las ventas al exterior de la economía española.

En Canarias, las exportaciones que se engloban en el grupo de Alimentación, Bebidas y Tabaco tampoco pueden presumir de haber alcanzado excelentes cifras en 2023. En total, el Archipiélago exportó productos por valor de 250,1 millones de euros, lo que supone casi un 2% menos que el año anterior cuando el valor fue de 255,4 millones. Es cierto que para encontrar una cantidad tan alta hay que retrotraerse hasta 2001, cuando los productos de las firmas exportadoras alcanzaron los 294 millones de euros, pero si se analizan los datos puede comprobarse como las exportaciones canarias no han levantado cabeza después de la pandemia.

Tras esos últimos años del siglo pasado, cuando se superaban de forma amplia los 300 millones de euros anuales, las exportaciones se ven bastante mermadas con la llegada de los peores años de la crisis financiera que estalló en 2007. A partir de 2015 comienzan a remontar para alcanzar en 2019, el último año de normalidad antes del estallido del coronavirus, los 241 millones de euros. La parálisis total de 2020 las hundió hasta los 174 millones y desde ahí se han incrementado hasta los 250 millones del año pasado. Pero, sin embargo, si se descuenta el efecto de la inflación, que ha elevado el precio de prácticamente todos los productos, bienes y servicios y que en Canarias cerró en 2023 en un 3,8%, puede leerse que se ha facturado unas cifras similares a las de prepandemia, pero no se ha ido más allá.

Inflación

El sector agrícola canario ya se lamentaba el pasado mes de febrero en la feria Fruit Logistica de que a pesar de haber llegado con los deberes hechos y una cosecha relativamente buena los handicaps que se encontraban para la exportación eran muchos. El primero de ellos la inflación que ha encarecido el precio de las frutas y verduras hasta un 16%, ya que los agricultores han tenido que repercutir el aumento de sus costes. Sin embargo, este alza de precios está provocando una bajada en el consumo. Por otro, el efecto colateral de la crisis en el Mar Rojo por el conflicto entre Israel y Palestina que sigue tirando al alza los gastos y dificultando el transporte.

Esta crisis en la exportación coincide con las protestas que está protagonizando el sector primario no solo en Canarias sino también en el resto del país. Los agricultores y ganaderos ya salieron a la calle el pasado mes de febrero para protestar por un sector que consideran que languidece atosigado por el incremento de los costes, la reducción de las rentas y los problemas que existen ante la falta de agua.

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