"Con el sistema de iluminación natural Solatube se puede convertir cualquier habitación oscura en un lugar lleno de vida y color, aunque la habitación esté en el sótano". Así lo asegura Felipe González Suárez, promotor de esta iniciativa creada en Australia y adquirida por norteamericanos. "A la gente le insisto en que, más que en lo que se ahorra, porque no consume energía, lo más positivo es contar con luz natural porque produce bienestar personal y comodidad".
"Es un sistema que funciona al cien por cien con los rayos del sol, captados por un captador que lo lleva por un tubo a donde se quiera. El tubo es tan reflectante que se puede permitir el lujo hacer curvas y llegar a donde se necesite", señala González. "Es como el agua que se puede dirigir a donde sea por tubos y se puede cerrar también". Con Solabube se eliminan los caraboyas de toda la vida, que crean putrefacción y humedades. Evita lo que produce una plancha de bicarbonato, evita el calor, no mancha la madera ni destiñe los colores, no afecta a los muebles porque quita los rayos UVA y UVB.
Buena acogida
"No hay ingeniero ni arquitecto que no valoren nuestro sistema como positivo. Lo que pasa es que a los canarios nos faltan un poco de cultura de eficiencia energético". En cambio en Barcelona ha tenido muy buena aceptación. "En Canarias se va aceptando cada vez más porque arquitectos lo tienen en cuenta a la hora de sus proyectos".
El sistema tiene unas lentes de domo patentadas para la mejor captura de la luz natural, que se pueden colocar en el techo de tal modo que pueda girar según los rayos del sol, o incluso en la pared en el caso de que no se permita instalar en la azotea.
Asimismo, un reflector interior del domo intercepta y redirecciona la luz solar y aumenta la cantidad de luz. Los tubos que se usan son los más reflectantes del mundo al tener un 99,7% de reflectividad espectral. Después los difusores garantizan la óptima distribución de luz por la habitación, teniendo varios difusores disponibles para diferentes combinaciones decorativas. La instalación puede hacerse con un tubo y difusor de 25 centímetros para iluminar una habitación de 15 metros cuadrados; uno de 35 centímetros para una de 25 m2: o de 53 centímetros para iluminar 60 m2.
