El aruquense Rodolfo E. Álamo Igeño, fundador y accionista de la empresa Metalicasa Canarias S. L., falleció ayer viernes a los 79 años. Su familia, amigos y allegados le recuerdan con gran cariño y respeto. Su entierro tuvo lugar en la mañana de hoy en el cementerio de Arucas a las 10 y media de la mañana. Su esposa, Matilde Matos Henríquez; sus hijos Luis Francisco, Rodolfo y Nelson Álamo Matos; hijas políticas: Marisa, Maribel y Lucía; además de sus nietos Cristina, Almudena, Altihay, Ariadna y Pablo; siempre le tendrán en sus pensamientos.
Álamo fundó Metalicasa hace 40 años en la ciudad de la cantería azul y el ron, Arucas. Desde su sede en Lomo Perdigón, en el barrio de Cardones, el negocio se especializó en la fabricación de bandejas para congelación de pescado, carros bandejeros, cintas transportadoras, puertas inoxidables para cámaras frigoríficas tanto para bordo como para tierra.
Su profesionalidad y experiencia en el sector de los metales los han avalado para ampliar en los últimos años el negocio, por lo que se han introducido en el sector de las panaderías y pastelerías elaborando bandejas, con o sin recubrimientos, moldes, carros portabandejas, mesas de trabajo inoxidables, y todo lo que se refiera a material de trabajo para dichos sectores. Los avances tecnológicos, que han permitido impulsar la maquinaria automatizada en el ámbito internacional y personal cualificado para ello.
La ciudad de Arucas y todos aquellos que apreciaban al empresario Rodolfo E. Álamo Igeño podrán despedirle el próximo martes, 5 de septiembre, a las seis y media de la tarde en la iglesia de San Juan Bautista de la localidad norteña.
