Yacimiento arqueológico, último bastión de los aborígenes y campo de batalla en la conquista de la isla, atalaya para estudiar geología, ruta de turismo de montaña, museo prehispánico o lugar privilegiado para ver las estrellas. Todo eso y mucho más ofrece el Centro de Interpretación del Bentayga, reabierto ayer tras una adaptación del edificio para incluirlo en la candidatura de Risco Caído y las Montañas Sagradas de Gran Canaria a Patrimonio Mundial de la Unesco.

El presidente del Cabildo, Antonio Morales, y el alcalde de Tejeda, Francisco Perera, encabezaron la reapertura del centro y recorrieron las nuevas instalaciones, donde se explican los últimos descubrimientos astroarqueológicos en el Roque Bentayga y se exponen huesos, arte rupestre y utensilios encontrados en los alrededores.

Entre otras novedades, se utilizan sistemas de realidad virtual para recrear las costumbres de los antiguos canarios. También se exhiben las armas que utilizaron los aborígenes y los castellanos en las batallas de la conquista, con paneles que reproducen los escritos de la época y recuerdan que el Roque Bentayga fue uno de últimos reductos de la resistencia.

El nuevo diseño ha sido realizado por la empresa Patrimonia Arqueología, que se encargará de la gestión a partir de ahora. El objetivo es mejorar la información y los servicios a los más de 25.000 visitantes anuales. El centro estaba asignado antes al área de Turismo del Cabildo, pero se ha traspasado a la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico para que sea "un enclave de referencia" en la propuesta de Risco Caído que se ha hecho a la Unesco , según explicaron sus titulares, Inés Jiménez y Carlos Ruiz, respectivamente.

La obra ha costado 18.000 euros y no se descarta que otras dependencias del Cabildo, como el Centro de Interpretación de la Reserva de la Biosfera en la Degollada de Becerra, cerrado desde hace años, también quede encuadrado en el departamento de Cultura, precisó Morales, quien resaltó que la ruta de las Montañas Sagradas se completa con el centro que se está construyendo en el casco urbano de Artenara, al que solo le falta la réplica exacta de la cueva principal de Risco Caído.

Artemi Alejandro, responsable de la empresa adjudicataria, dijo que la Sierra del Bentayga es un yacimiento apenas investigado y auguró "sorprendentes descubrimientos" cuando se estudie en profundidad. A su juicio, "es como un faro en mitad de la isla y lleno de misterios". Por lo pronto, el centro de visitantes ofrece en la primera sala un esbozo de la prehistoria de la isla, pues la mayoría de los turistas no la conoce.

En otra dependencia, sobre un gran mapa la isla, se muestra la superficie del denominado Paisaje Cultural de Risco Caído y los Espacios Sagrados de Montaña, donde se diferencian los principales conjuntos trogloditas (Risco Caído, Risco Chapí, Bentayga y Acusa) y las cuevas artificiales con manifestaciones rupestres.

En otra de las salas se exponen los descubrimientos arqueoastronómicos, en el que se resalta el concepto del "celaje" y la observación de los astros. Inés Jiménez trasladó hasta la cumbre el certificado que recogió el pasado mes de enero en Fitur, en el que la Fundación Starlight declara a Gran Canaria como uno de los 20 destinos mundiales idóneos para contemplar las estrellas.

Artemi Alejandro subrayó que los tres roques de la Sierra del Bentayga que apuntan al cielo tenían para los aborígenes "claras connotaciones astronómicas y religiosas que conectan lo humano con lo divino", visibles en el marcador solar que existe en el almogarén.

Además de museo y área de servicios para el turista, el Centro de Interpretación es también el punto de partida para recorrer el yacimiento arqueológico, "un viaje al pasado a través de un sendero que parte del centro y que se caracteriza por sus imponentes barrancos, precipicios y crestas coronadas con sus roques que también hablan del pasado geológico de Gran Canaria", resaltó.

La visita, gratuita, tiene una duración media de unos 50 minutos y permite contemplar los vestigios del poblado, murallas, enterramientos, cuevas con manifestaciones rupestres, inscripciones alfabéticas y el almogarén.

Tras la reapertura del centro, Morales se trasladó a Tejeda y participó en un encuentro de coordinación de la candidatura de Risco Caído, a la que asistieron técnicos del Cabildo y los alcaldes de Artenara, Jesús Díaz, y de Agaete, Juan Ramón Martín.