Seaside ya ha reabierto el Palm Beach, de cinco estrellas, y el Sandy Beach, de cuatro estrellas, después del obligatorio cierre por las crisis del coronavirus. Así, en ambos recintos ya han llegado los primeros clientes, recibidos entre aplausos por los respectivos equipos de trabajo. En el caso del Palm Beach, encabezada por su directora general Nicole Schaffers, "los huéspedes se convirtieron en protagonistas con una acogida amable y un nivel de profesionalismo al más alto nivel, consiguiendo que la magia surgiera al primer contacto", informa el hotel en un comunicado.

Desde que se inauguró en los años 70, el hotel Seaside Palm Beach, situado en la primera línea de la playa de Maspalomas, ha sido uno de los estandartes principales de la hotelería en Canarias, además de punto de referencia en lo que es un hotel de lujo, además de ser miembro de Design Hotels.

Se trata de un hotel con una decoración e interiorismo de cinco estrellas, con un sello de identidad propio, donde se recrea el espíritu de los años 70.

Mientras, el Seaside Sandy Beach, de cuatro estrellas y localizado en Playa del Inglés, también ha recibido a sus primeros huéspedes y entre aplausos, con ilusión, emoción y algo de nervios por lo que han vivido los empleados en los días previos a la apertura. "Estamos deseando abrir y volver a recibir a nuestros huéspedes", apuntaba su directora, Úrsula Matas.

Fue el miércoles 5 de agosto el día de la apertura, cuando ya se encontraba todo preparado para recibir a los primeros clientes con la mejor de sus sonrisas. "El equipo trabajó para que no faltara de nada, aunque el rodaje de los primeros meses tras el parón obligatorio que hemos sufrido es el que irá marcando el ritmo a este hotel icónico del sur de Gran Canaria", añade la compañía.

El hotel cuenta con una decoración propia de una antigua casa morisca, todo un placer para los amantes de esta cultura. Tanto el exterior como los espacios comunes recuerdan a ese pasado ya tan lejano, un espacio construido a base de detalles, de los pies a la cabeza, desde los arcos exteriores y la recepción con ese estilo tan característico hasta las cómodas habitaciones.

Ofrece un servicio y una localización inmejorable a pocos metros de la playa, una situación que ha contribuido todos estos años a que sus huéspedes disfruten de una experiencia inolvidable en su visita al Seaside Sandy Beach.