Las obras de la segunda fase de la carretera de La Aldea, en la isla de Gran Canaria, continúan con el calado este jueves del túnel número 7 del proyecto de ejecución, uno de los dos túneles junto con el número 6, que atraviesan el entorno del barranco de Guayedra.

De esta forma ascienda a tres los túneles que están calados (unidas ambas bocas) en este complejo proyecto que contempla la construcción de ocho túneles en un trazado de algo más de 8,5 kilómetros, uno de ellos doble, según ha informado la Consejería de Obras Públicas, Transportes y Vivienda del Gobierno de Canarias en nota de prensa.

El túnel número 7 tiene una longitud de 350 metros y, a diferencia de los otros dos que ya se han calado, se ha ejecutado por una sola boca hasta salir al exterior de la montaña perforada, que es lo que ha ocurrido este jueves con los últimos trabajos de perforación y el cale. Este túnel, como también le ocurre al número 6 que se está perforando, se tiene que hacer por una sola boca ejecutando desde el interior un paraguas de micropilotes "bastante complicado" que permite el cale en la otra boca con seguridad, ya que las condiciones orográficas y medioambientales de la zona no permiten acceder desde fuera a la otra boca.

Para ello, el túnel se ha 'atacado' desde el Barranco de Guayedra y en dirección Norte (Agaete), por lo que están excavados y sostenidos sus 350 metros de longitud. Seguidamente comenzarán las labores de excavación en mina, que conllevará trabajos de sostenimiento del terreno a base de gunitado, es decir, la proyección de hormigón sobre las paredes de roca para conseguir una superficie uniforme y resistente sobre la que poder operar posteriormente.

Además, previamente a iniciar las labores de perforación de este túnel, se ejecutó una amplia obra de drenaje para garantizar el cauce del barranco de Guayedra hasta el mar.

Por su parte, el túnel 3, el de Guguillo, con 604 metros, fue el primero que se caló de esta obra en mayo de este mismo año, y al mismo le siguió el túnel del lado mar de los dos que componen el paso subterráneo bajo el macizo de Faneque, al que ahora se les une el túnel 7 en Guayedra.

Para perforar estos túneles la UTE formada por las empresas Ferrovial-Agromán-Acciona Construcción-Lopesan y Bitumex, está empleando voladuras con un novedoso explosivo a base de emulsión y también con medios mecánicos.

La necesidad de estos túneles hace que el 70 por ciento del recorrido de este nuevo tramo de la carretera de La Aldea sea subterráneo, de tal forma que indican que se minimiza el impacto medioambiental en el entorno que atraviesa.

La Consejería ha indicado que, debido a la "importancia de esta obra", mantiene un despliegue de trabajadores y maquinaria las 24 horas del día en diferentes turnos y actualmente se encuentran realizando, en su mayoría, tareas de perforación en cuatro túneles, un semienlace, así como en obras de muros y movimientos de tierras de los futuros enlaces.

Las obras de esta II Fase de la Carretera de La Aldea se adjudicaron con un presupuesto de 152.361.708 euros y un plazo de ejecución de 65 meses. El nuevo tramo que sustituirá a la actual GC-200 tiene un trazado de 8,5 kilómetros, una nueva vía rápida con velocidad específica de 80 kilómetros por hora y será una sucesión de túneles y viaductos hasta llegar a conectar con la I Fase de la carretera, el tramo El Risco-La Aldea, ya terminado y en uso desde 2017.

La accidentada orografía de esta zona de la isla de Gran Canaria hace que la obra sea de una "gran complejidad", ya que implica la construcción de ocho túneles, dos viaductos y tres enlaces.