Primeras horas del verano que se viven en remojo en las medianías del norte de Gran Canaria, con la villa de Teror copando las máximas pluviométricas del archipiélago con más de nueve litros por metro cuadrado, recogidos hasta últimas horas de la tarde tras dos días de persistentes pero serenas garujas y unas temperaturas más propias del otoño, oscilando entre los 14,5 y los 17,2 grados durante la jornada de este martes.
La bolea también a tocado en Valleseco, con 5,8 litros por metro cuadrado y un tiempo algo más fresco aún, entre los 13,4 y los apenas 15,7 grados centígrados de máxima, esto, por una nubosidad cargada de humedad procedente del Atlántico y que se queda fijada entre la cota de los 500 y 1.000 metros aproximadamente, rezumando tanto lluvia vertical como la horizontal que se condensa en contacto con la laurisilva en un riego extra que le facilita la entrada a las mayores temperaturas que están por llegar.
Esta entrega de lluvias en esta época del año, que son habituales en las franjas septentrionales de Canarias, suponen un alivio, “porque cada día nublado es uno menos de sol”, como apuntan los expertos forestales, gracias a una humedad que va calando en el suelo ofreciendo a las raíces algo de agua, hidratando a las plantas y haciéndolas algo más resistentes de cara al verano.
Además, la situación en los próximos días será similar en las vertientes viradas al norte de las islas de mayor relieve, donde de nuevo se esperan, con baja probabilidad durante el día de hoy miércoles, lluvias dispersas, ocasionales y débiles, con una calima en retirada, según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología. Además las temperaturas también experimentarán pocos cambios, o incluso en ligero descenso.
Fuerte marejada
El viento seguirá rolando del noroeste, soplando con más intensidad en ambos flancos de las islas, el noroeste y el sureste durante el día, mientras que las cumbres el viento será flojo y de componente oeste.
También hay que prestar atención al estado de la mar, ya que si bien no está sujeto a ningún tipo de aviso por parte de la Aemet, sí que soplará el viento con cierta fuerza en zonas como el canal Anaga-Agaete, o en las aguas costeras de Gran Canaria, con picos de fuerza 6, y con fuerte marejada tanto en el oeste como el sureste de la isla, disminuyendo a marejada y con alturas de dos a tres metros en el norte.
Para mañana jueves habrá otra entrega de cielos nubosos, que se irán aclarando por la tarde, en las islas de La Graciosa, Lanzarote, Fuerteventura y norte de las islas más montañosas, y despejado en el resto.
En estas últimas áreas vuelve la posibilidad de garujas con temperaturas con pocos cambios y vientos procedentes del norte, de flojos a moderados.
Las temperaturas podrían subir ligeramente el viernes, con la panza de burro anclada en costas y medianías del norte, y nubes de nuevo en las islas más orientales, sin descartar otra jornada más las posibles lluvias débiles, en una predicción que es casi calcada a la que se prevé para todo el fin de semana e incluso buena parte de los siguientes días.
