La finca de Las Hoyas, en el barranco de El Andén, alberga ya los primeros captadores de agua para reforestar con laurisilva esa zona del municipio de Valleseco, elegida por su buena orientación para atrapar la lluvia horizontal que genera el alisio sobre la vertiente norte de la isla de Gran Canaria. Esta semana concluye la instalación de los primeros 15 aparatos, primer paso de la iniciativa europea Life-Nieblas, según adelantaron Inés Jiménez, consejera de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria, y Gustavo Viera, responsable técnico de Gesplan en el proyecto.
Inés Jiménez explicó que Life Nieblas es una iniciativa financiada por el Cabildo y la Comisión Europea como “un proyecto único y pionero a nivel de la UE en cuestión de lucha contra el cambio climático y recuperación del medio natural”. El objetivo del proyecto, además de reforestar 35 hectáreas con especies de laurisilva, es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, comúnmente generadas en este tipo de actividades, así como abastecer el cien por cien de las necesidades hídricas de la zona de actuación usando captadores de niebla.
El área principal de actuación se encuentra en esta finca de la localidad de Valsendero, en un terreno cedido por la Heredad de Aguas de Arucas y Firgas. “La repercusión que siglos de actividad antropológica ha tenido sobre la ecología canaria es evidente en la zona y por ello la recuperación de la laurisilva es primordial para este medio natural canario”, apuntó Gustavo Viera.
El objetivo es cubrir 35 hectáreas con 20.000 plantas y regarlas con la lluvia horizontal
El último gran incendio que afectó a la cumbre de Gran Canaria, en el verano de 2019, agudizó la degradación ecológica en el barranco de El Andén, aumentando el riesgo de desertificación y el empobrecimiento de los sistemas hídricos subterráneos. El resultado es la pérdida de capacidad de retención del agua y suelo por medios naturales.
Monteverde
Los 20.000 ejemplares de las especies a plantar responden a las características ecológicas del monteverde canario y cumplen con varias regulaciones para la protección del medio natural como Red Natura 2000, establecida por la Unión Europea, y también obedeciendo a su clasificación de Zona Especial de Conservación (ZEC). El equipo de proyecto se centrará en la plantación de fayas, barbusanos, laureles, brezos y otras especies del mismo ecosistema, teniendo como objetivo la reforestación de unos 7.000 ejemplares cada año.
El monte del laurisilva tiene como método principal de supervivencia la captación de agua de niebla en sus hojas ayudándose de los vientos alisios para regar su suelo. “Este fenómeno es comúnmente conocido como lluvia horizontal y es esa misma idea la que concibe a los captadores de niebla”, detalló el técnico de Gesplan,
La niebla es empujada por el viento a través de finos filamentos que son capaces de condensar en pequeñas gotas la humedad de las nubes y, por gravedad, finalmente precipitar dichas gotas hacia la base de los captadores donde el agua es recogida y canalizada hasta tanques de almacenaje.
De esta manera, el agua puede ser capturada en zonas que no cuentan con su medio natural, la laurisilva, y ser utilizadas para establecer nuevos nichos de estos bosques perdidos hace mucho tiempo.
“Life-Nieblas pretende poner a prueba diferentes métodos de reforestación, todos siguiendo una ética de emisiones cero y el abastecimiento de agua por medio de los captadores de niebla”, detalló Viera, quien recordó que ya hubo una experiencia comercial en una finca cercana, una embotelladora de agua de lluvia que no obtuvo los resultados esperados y acabó desmontando los captanieblas. También se conoce un experimento privado en Moya y una idea de utilizar esa agua en la elaboración de cervezas artesanales y licores.
El experimento que se desarrolla en Valleseco se divide en cuatro fases: plantación tradicional; reforestación con el uso de Cocoons (un sistema desarrollado por un proyecto anterior el cual es autosuficiente y biodegradable); uso de mallas metálicas individuales como colectores de agua individual; y utilización del Sistema Autónomo de Descarga (SAD) desarrollado por el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC).
Todos estos métodos de reforestación serán abastecidos mediante el agua recogida por los captanieblas tradicionales, los primeros 15 que se terminarán de instalar esta semana. Además, el Instituto Canario de Investigaciones Agrícolas (ICIA), en colaboración con la Universidad de La Laguna, investiga métodos de mayor eficiencia en la captación de niebla y prepara dispositivos con materiales de mejor calidad, de fácil montaje, instalación y despliegue, que no solo beneficiará al desarrollo del medio ambiente sino que también busca ayudar a sectores como el agrícola para el abastecimiento de agua sostenible, anunció Viera.
El último incendio aumentó el riesgo de desertificación y empobreció las aguas subterráneas
Para el desarrollo de Life-Nieblas, Gesplan cuenta con la participación de varios socios que aportan desarrollo científico y tecnológico. Entre ellos está Creaf, una consultoría científica que ha asistido en la elección de las áreas de actuación, así como en el desarrollo de métodos y análisis de datos que se recogerán a lo largo de este proyecto.
El ITC desarrolla un sistema de irrigación autónomo que espera probar la eficiencia de sistemas auto-regulados que reduzcan emisiones y costes a largo plazo. El proyecto cuenta con el apoyo de socios internacionales, la Comunidade Intermunicipal Viseu Dão Lafões se encargará de replicar los métodos y estrategias de reforestación en Portugal.
