Subir caminando hasta el municipio de Teror durante las fiestas en honor a la Virgen del Pino, patrona de la Isla, es una práctica que muchos canarios han acabado asumiendo como tradición anual. Es así hasta el punto de que algunos iniciaron esta costumbre cuando aún llevaban pañales, dentro de un carrito arrastrado por sus padres. Este es el caso de Gabriela, una joven de 18 años de Telde.
Cada año (desde antes incluso de tener uso de razón) realiza la peregrinación para ver la imagen santa. «Algunas veces es solo por cumplir con la costumbre y en otras ocasiones sí que le pido promesas», afirma. En esta ocasión tiene una intención concreta, compartida con su amiga Zuleima, que la acompaña por primera vez en el trayecto este año. Sin embargo, prefieren guardársela para sí mismas. «Hasta que no se cumpla no queremos decir nada», ríen.
Procedentes del municipio de Telde, efectúan la caminata como muchos desde el barrio capitalino de Tamaraceite, desde donde el trayecto se limita a las dos horas aproximadamente. En este mismo camino, que se estrena oficialmente para los peregrinos tras la conclusión de su ensanchamiento, también se encuentra Deborah García, madre de uno de esos niños que inician su andadura pal Pino. Su marido, el padre de la criatura, que arrastra el carrito con el bebe, resalta sin detenerse: «Como me pare se me echa a llorar». «Es nuestra primera vez haciendo la peregrinación», exclama García algo asfixiada. «Estamos acalorados pero satisfechos», agrega con alegría.
Aquellos fieles que decidieron tomar el camino desde la capital pudieron disfrutar de los nuevos espacios habilitados para los caminantes en el lado izquierda de la carretera, que sin duda facilita con mayor comodidad el trayecto. Sin embargo, desde el Ayuntamiento ordenaron también el cierre de esta vía en sentido de bajada desde las 7.00 horas para garantizar la seguridad de los viandantes.
El calor acompañó durante la primera mitad del día, a pesar de que el cielo no estaba del todo despejado y una ligera brisa refrescaba a los peregrinos durante la caminata. Tras la llegada al viaducto, tres agentes de la Guardia Civil señalan que este año es obligatoria el desvío hacia el camino de la Fuente Agria, para favorecer el tráfico de vehículos que suben hacia el pueblo (cuya entrada se corta a la altura de la gasolinera, por lo que los conductores deben subir por el acceso hacia Arucas para buscar estacionamiento).
«Fue una sorpresa, sobre todo porque por ese otro camino hay que subir una cuesta enorme», sostienen entre risas Antonio Mayor y Mariela Martín, un matrimonio que decidió este año realizar el camino tanto de subida como de bajada. «Ha sido duro, pero teníamos que hacerlo porque Pino cumplió el deseo que le habíamos pedido», explican emocionados. «Nuestra hija sacó las oposiciones a maestra con plaza», expresan con emoción.
También cumplió la petición de Samanta, que pidió un trabajo fijo. «Tuvimos que arrastrarla para que cumpliese la promesa», sostienen con una indignación fingida sus primas Selena y Naira. «Bueno, yo tenía intención de pedirle perdón a Pinito», asevera la afectada entre risas. Ahora su camino está centrado en ganar la lotería. «Tenemos un número comprado que nos da buenas vibraciones», agregan enrraladas. El camino lo efectúan con mucho gusto. «Ahora, me parece una absoluta falta de respeto que no haya ningún solo chiringuito en el que comprar cervezas», sostiene Alfonso, otro de los acompañantes de esta aventura.
Por otro lado, no todos los que caminaron ayer lo efectuaron por costumbre o promesa. En el caso de Jesús y Juan Luis Cabrera (suegro o y yerno, respectivamente) aprovecharon el camino como prácticas para realizar el camino de Santiago. «Tenemos que ponernos en forma, así que cuando lleguemos a Teror seguiremos después hasta Arucas», admiten ilusionados. Por otro lado, Isabel, Alba y Sara y Jesús decidieron realizar esta andadura «solo por agradecimiento». «Para nosotros ha sido un año buenísimo, en el que hemos tenido mucha suerte y también es importante ir a ver a Pino para darle las gracias por acompañarnos», detallan.
El corte al paso del viaducto impidió a los viandantes parar para sacarse fotos con las letras que suelen instalarse en la rotonda de acceso al pueblo, en las que se leen siempre Fiestas del Pino. Sin embargo, muchos afirmaron que la alegría sentida al llegar por fin a la plaza tras dos horas mínimas de trayecto en la mayoría de los casos compensa todas las penas que hayan podido sentir durante el camino. Sobre todo teniendo en cuenta que estas son las primeras fiestas en tres años que se celebran sin restricciones sanitarias, por lo que el ambiente festivo que se apreció en el casco fue incomparable.
De hecho, hasta rabia le dio a Rita Hernández comprarse el billete de vuelta a la capital. «Lo cogí para el mediodía porque salí de trabajar y decidí venirme sola a hacer el camino por gusto y no pretendía quedarme, pero con la misma lo regalo porque en verdad apetece disfrutar de las fiestas», sostiene.
En la imagen principal, una familia de Las Palmas de Gran Canaria disfrutando de la caminata. En primer plano, un padre arrastra el carrito de su bebé. A la derecha, Antonio Mayor y Mariela Martín, una pareja que volvía de Teror por Tamaraceite. |
Una promesa para que Raúl despierte ya
Hace un mes que los jóvenes Raúl e Iván, vecinos del municipio de Telde, sufrieron un accidente al chocar contra una valla y caer en un desnivel de cinco metros en el barrio de Lomo Magullo. El suceso dejó en estado crítico a Raúl, que permanece desde entonces en coma. Sus familiares, amigos y conocidos continúan consternados, pero mantienen la esperanza de que salga pronto adelante. Por este motivo, pretenden subir esta mañana a partir de las seis de la mañana caminando desde Tamaraceite a Teror para pedir a la Virgen del Pino por la salud del joven, así como de Iván. «También él está muy afectado por lo que ha pasado, así que hay que pedir por él también», concreta Nayra, madre de Raúl, que está ingresado en el Hospital Insular. «La verdad es que nos sentimos súper arropados por todos, el apoyo ha sido incondicional», asegura emocionada. De hecho, a la caminata asistirá el equipo directivo y el profesorado del instituto del joven, así como el alumnado y algunos padres. Todos ataviados con camisetas con mensajes de ánimo.