San Bartolomé de Tirajana.

Riu afronta la segunda gran reforma del hotel Gran Canaria

La cadena invierte 18,2 millones en cambiar el establecimiento de Meloneras | Se colocan placas fotovoltaicas en las azoteas

Imagen de cómo quedará una de las habitaciones del hotel de Riu .

Imagen de cómo quedará una de las habitaciones del hotel de Riu . / La Provincia

La cadena mallorquina Riu afronta la segunda gran reforma del hotel Gran Canaria desde que lo abrió hace más de veinte años. Se trata de un establecimiento de 643 habitaciones que abrió sus puertas en Meloneras en el 2000, y que ya afrontó la primera renovación en 2013.

El proyecto de renovación del hotel Gran Canaria que es el primero del mundo que entra en la segunda vuelta de reformas, según señalan desde el grupo hotelero, supone una inversión de 18,2 millones de euros, y es la muestra de que «la cadena siempre sigue apostando por mejorar la calidad de los establecimientos para atender la demanda de los clientes».

Las obras no conllevan ampliar la actual oferta de plazas. El hotel mantendrá el mismo número de habitaciones, pero si que el proyecto, que acaba de recibir el visto bueno de la Junta de Gobierno Local de San Bartolomé de Tirajana, se marca como reto transformar el establecimiento por completo, lo que supone un cambio total de las habitaciones, los restaurantes, las piscinas y hasta de las azoteas donde se van a instalar placas fotovoltaicas para mejorar la sostenibilidad de todo el edificio.

Desde el grupo, propiedad de la familia Riu explican que se van a aprovechar todas las azoteas y cubiertas para instalar plazas fotovoltaicas con el fin de que las instalaciones sean más eficientes desde el punto de vista energético ya que este tipo de establecimientos hoteletos tienen un elevado consumo de electricidad y por eso, si bien el cambio que se imprime las habitaciones es muy importante, insisten en poner en valor este apuesta por la sostenbilidad.

Para la cadena se considera una gran reforma ya que el hotel va a experimentar una importante transformación. Las habitaciones cambiarán de diseño, con nuevos colores más frescos y con nuevo mobiliario.

También se amplia la oferta gastronómica porque se crea un restaurante italiano, un restaurante «culinarium”»y se realiza una ampliación del restaurante principal que contará con una terraza aún mayor, mientras que el restaurante ‘Pepes food’ cambia de ubicación.

Respecto a las piscinas se va a construir una nueva para animación y la zona de hamacas de la piscina principal y la infantil se van a ampliar. En total el hotel contará con seis piscinas de las que una climatizada.

Las obras tendrán un plazo de duración previsto de entre cuatro y seis meses y afectarán a una superficie global de 2.300 metros cuadrados, entre las obras que previstas en la planta baja, la primera y el frente de la parcela.

Fuentes de la cadena mallorquina señalaron que, tras un pasado año en el que se registraron datos de ocupación récord, con un importante crecimiento de la demanda que permitió incluso lanzar una campaña de ofertas, también 2023 ha empezado con fuerza y esperan que la tendencia se mantenga.

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