Canarias comienza la semana con lluvias

El fin de semana ha estado marcado, a lo largo de toda España, con diversos avisos rojos de temporal marítimo a causa de una nueva borrasca que ha recibido el nombre de Domingos, según ha revelado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Si bien este fenómeno meteorológico adverso no ha afectado directamente con Canarias, si ha provocado que su influencia provoque avisos por fenómenos costeros y de lluvias en el norte de las islas.

Una buena tromba de agua sorprendió a muchos en la tarde-noche de este domingo, y durante la madrugada del lunes. 

Algunas de las estaciones de la AEMET en Canarias han sido las que han registrado una mayor cantidad de precipitaciones acumuladas en toda España. Es el caso de La Dehesa (El Pinar), con 35.6mm, Teror (Gran Canaria), con 28.8mm, San Andrés y Sauces (La Palma), con 28.0mm, Valleseco (Gran Canaria), con 26.4mm, y San Juan de la Rambla (Tenerife), con 18.2mm.

Para este lunes, la institución meteorológica ha pronosticado lluvias moderadas y persistentes en medianías del norte de las islas más montañosas que, en Tenerife, La Palma, y Gran Canaria han sido localmente fuertes durante la madrugada. 

Los termómetros registrarán un ligero descenso moderado, principalmente en zonas orientadas al norte y este, y mínimas con pocos cambios.

Gran Canaria se mantiene en alerta por oleaje y avisa de posibles aguaceros

Alerta por oleaje

El Gobierno de Canarias ha decidido mantener la alerta debido a la presencia de olas que podrían alcanzar hasta cinco metros y medio de altura, así como marejadas en la costa norte de Gran Canaria. Además, ayer se declaró alerta por lluvias en los municipios afectados por el incendio forestal en Tenerife, y se emitió una prealerta por posibles aguaceros en el resto de la isla, incluyendo Gran Canaria, La Palma y La Gomera.

A pesar de que se esperaba que las olas más grandes ocurrieran ayer, la dirección general de Emergencias ha decidido mantener activos los niveles de precaución por los fenómenos costeros en todo el Archipiélago. Esta situación se ve agravada por las malas condiciones del agua, principalmente debido a las marejadas provenientes del norte y noroeste. Además, se prevé que las olas alcancen alturas de entre cuatro y cinco metros y medio, especialmente durante las horas de pleamar.

Un pasillo de borrascas

¿Por qué el Atlántico se ha convertido en una 'fábrica' de fuertes borrascas? En el Atlántico Norte, actualmente se está experimentando un período de actividad intensa con la formación de varias borrascas, siendo una de ellas denominada Ciarán. Estas perturbaciones se desplazan hacia Europa Occidental, afectando tanto a la Península Ibérica como a las Islas Baleares.

Este fenómeno complejo no puede ser atribuido a una sola causa, pero se pueden identificar cuatro mecanismos que podrían explicarlo. Uno de ellos es la presencia de un chorro polar extremadamente fuerte en las capas altas de la atmósfera.

Este chorro polar alcanza velocidades de entre 200 y 300 kilómetros por hora y se ha intensificado debido a las diferencias de temperatura entre las regiones polares y tropicales, como señala la fuente 'RAM'. Estas corrientes de aire son flujos que transportan el calor y el frío a través del planeta y se forman entre dos masas de aire con propiedades diferentes.

Otro factor que contribuye es la presencia de perturbaciones o áreas de baja presión en las capas bajas de la atmósfera. Estas condiciones se originan en la parte occidental del Atlántico y son captadas y amplificadas por el mencionado chorro polar, dando lugar a la formación de las grandes borrascas que observamos en la actualidad.

Además, las altas temperaturas del agua del mar también desempeñan un papel importante en la generación de más borrascas y ciclones en la región. La existencia de áreas de humedad y corrientes atmosféricas en el lado sur de estas perturbaciones también intensifica el desarrollo y la actividad de las mismas.