Teror

Teror homenajea a sus imprescindibles

El proyecto Cuidándome pone en valor el trabajo de las personas cuidadoras del municipio

Diferentes historias muestran las vidas de todos los que luchan por conservar el bienestar de otros

Reyes Ojeda Domínguez, cuidadora en Teror

Reyes Ojeda Domínguez, cuidadora en Teror / Frank Hernández

Las personas cuidadoras del municipio de Teror han recibido un reconocimiento por su trayectoria dedicada al cuidado permanente de los más necesitados. Un evento que culminó el proyecto ‘Cuidándome’, financiado por el Cabildo de Gran Canaria en el Marco Estratégico por la Igualdad Gran Canaria Infinita, que desde el pasado mes de octubre ha desarrollado acciones específicas dedicadas a las personas cuidadoras de Teror. El proyecto se ha llevado a cabo a lo largo de un mes, en el que desde la concejalía de igualdad del ayuntamiento de Teror se han puesto en contacto con las diferentes cuidadoras del municipio.

Entre las homenajeadas se encuentra Reyes Ojeda , Victoria de los Ángeles, María Coromoto, María Teresa Delgado, Victoria Isabel Dávila, Saulo Domínguez, Esther Falcón, el servicio de ayuda al domicilio del ayuntamiento de Teror, Aquilina Fátima Sosa, Carmen González, Caledonia Díaz y Elsa Maroto. Además de los mencionados, existen varias personalidades más, aunque estas prefirieron seguir con su día a día sin ser una cara visible.

Según ha explicado Laura Quintana, concejala de igualdad, esta actividad ha constado de tres partes. Una primera en la que las fotos han sido protagonistas, a través de una exposición en la que se transmitió la labor y el amor de todas esas personas que cuidan de otras, recogiendo momentos de todos esos cuidadores mientras hacen su labor. La segunda parte consistió en sacar a todas esas personas de su día a día y llevarlas a cuidarse a ellas mismas. De ahí procede el nombre del proyecto Cuidándome. Un día de ocio en el que todos los reconocidos han desconectado, y donde desde el área de igualdad, se les ha facilitado a otra persona que cuide de sus pacientes durante ese rato que ellas estaban disfrutando.

A partir de esa salida, y con el objetivo de empezar a tener tiempo para uno mismo, Laura Quintana asegura que a partir de ahora continuarán mimando a esas personas cuidadoras del municipio con talleres para la desconexión, por lo que este proyecto no finalizará con este homenaje, sino que irá más allá. La tercera y última parte se centra en el acto que disfrutaron en el Auditorio de Teror con este reconocimiento, que comenzó con un video reportaje de vivencias, donde cada una de estas personas muestra su día a día y su antes, durante y después con estas personas dependientes.

Un vídeo reportaje mostró las vivencias y el día a día de todas estas personas

"Hay una persona en concreto que ahora está empezando a afrontar la vida de nuevo, después de que falleciera su paciente, y tal y como ella explica, es como volver a empezar de cero, porque es como iniciar una vida nueva", explica Laura Quintana. El objetivo no es otro que visibilizar el trabajo duro que llevan a cabo estas personas, pues desde el área de cultura confiesan que nadie es consciente de lo que supone hasta que lo vives de cerca. "Por ese motivo queremos transmitir lo que supone esta labor tan poco visible en la sociedad actual".

Un acto para el recuerdo en el que las protagonistas fueron todas estas personas, que han dedicado gran parte de su vida al cuidado de otras, y donde además de recibir un pequeño detalle como reconocimiento, recibieron un pendrive en el que se refleja todas las vivencias que han experimentado a lo largo de este mes que duró el proyecto. En una noche marcada por la ilusión y la gratitud, no faltó la música en directo con la actuación del grupo musical formado por mujeres ‘Tacones rojos’. Historias que son capaces de marcar el alma de muchos, y que reconforta a todo aquel que en algún momento de su vida, ya sea breve o durante un largo periodo de tiempo, la ha dedicado a cuidar, con cariño e ilusión, a una persona que se ha terminado convirtiendo en irremplazable. 

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