El paisaje del municipio de Tías de los años cincuenta del pasado siglo era totalmente diferente al actual. La agricultura de secano fue el eje fundamental y la base del desarrollo de esta localidad. De la carretera general del sur hasta los límites de la costa las tierras estaban destinadas a la producción tomatera. El cultivo del tomate, a pesar de realizarse con métodos arcaicos, con la penuria de la sequía, aporta unas producciones respetables para le época de hasta 12.000 kilos por hectárea y año.

Para recordar esa época, el Ayuntamiento de Tías ha recreado en la Feria Insular de Artesanía de Mancha Blanca (Tinajo) lo que podría haber sido la antigua empaquetadora de tomates de los años 60 del pasado siglo. Según el libro El Postigo de Tías, escrito por Juan Cruz Sepúlveda, en este municipio llegaron a existir varias empaquetadoras de tomates.

Así recuerdan la del cosechero y exportador Lorenzo Viñas, que llegó a tener hasta 60 personas empaquetadoras en su almacén de Mácher. Otro almacén muy peculiar pertenecía a los hermanos Borges por estar enclavado en plena zona de cultivo en la costa, en el Camino de Hoya Limpia, así como el de la familia Padrón en el Varadero del muelle de La Tiñosa.

"En un primer momento, como no había línea de barco con los puertos receptores como Barcelona y Sevilla, el tomate se recogía verde para aguantar los 15 días que tardaba en llegar al mercado en óptimas condiciones de consumo. A veces, cuando las exigencias del embarque lo demandaban se tenía que trabajar de noche a la luz de velas, faroles de petróleo y más tarde con lámparas de gas.

El alcalde de Tías, Francisco Hernández, y el teniente de alcalde Amado Jesús Vizcaíno recordaron durante la inauguración del stand que muchos de los actuales hoteles y complejos alojativos en la costa de Tías se asientan en antiguas plantaciones de tomates que convirtieron al municipio de Tías en la zona rural de Lanzarote que mayores extensiones tenía dedicados al cultivo de este producto.

El alcalde resalta que fue precisamente hace 50 años cuando se logró el pico más alto en la producción tomatera en Lanzarote. En 1968, se alcanzaría el tope en la producción de tomates con 510 hectáreas dedicadas a este cultivo en la isla de los volcanes, teniendo a las zonas de Mácher, Tías y La Asomada entre las de mayor producción, mientras que en el año 1986 se registra el pico más alto del cultivo de la cebolla en Lanzarote con 350 hectáreas, siendo ya en esa época la superficie dedicada a tomateros únicamente de 70 hectáreas.

En el stand se reseñan en paneles los detalles de estas producciones, y se exhiben fotografías de la época, donde muchas personas, en su mayoría mujeres, realizaban estas tareas laborales como empaquetadoras. Además se ha elaborado un folleto informativo.