La instalación del conjunto escultórico de cuatro caballos con sus jinetes The rising tide ( La marea creciente) del artista británico Jason deCaires en la plataforma rocosa situada a los pies del Castillo de San José es ya historia.

En apenas un hora, la grúa de la barcaza Antignano retiró del mar en la tarde de ayer las esculturas que Centros de Arte, Cultura y Turismo del Cabildo de Lanzarote, con CC entonces al frente de esa consejería, había colocado en septiembre de 2016 y que tres años y dos meses después con el nuevo grupo de gobierno en la corporación insular (PSOE, PP y Somos Lanzarote) ha sacado del agua, en contra del criterio descultor. Los intentos de la activista alemana residente en Lanzarote Susanne Bernard de impedir la retirada de las piezas agarrada a una de las obras a las que intentó atarse enganchándose a su cuello una de las cintas amarillas con las que los buzos las amarraban para que la grúa las elevara, fueron infructuosos. "Me siento triste y mal por no poder impedir que los caballos se quedaran en el agua. Jason está en Australia pero hoy su corazón está aquí", aseveró Susanne tras salir del mar.

Alrededor de una decena de personas seguía la operación desde la entrada de acceso al restaurante del castillo y algunas de ellas animaban a Susanne a continuar en su lucha. "¡Vamos Susanne!", le gritaba Mash Graner.

"No me gusta lo que están haciendo. Quieren luchar contra el cambio climático y quitan los caballos. Esto significa volver a tiempos pasados y estar en contra del arte", se quejó Mash.

DeCaires concibió La marea creciente como un gesto para reclamar una nueva vida para el planeta Tierra y frenar las acciones que contribuyen al cambio climático.

La barcaza trasladó´los caballos hasta Puerto Naos y allí se descargaron y se colocaron en el camión plancha que los transportó a una nave del Cabildo.

El pasado 6 de octubre, la presidenta insular, María Dolores Corujo, argumentaba en un polémico pleno que convertir la exposición de los caballos en definitiva conllevaría abonar a su autor 200.000 euros.

Corujo (PSOE) acusaba a CC de tenderle "una trampa en tiempo de descuento", pocos días de que ella tomara posesión de su cargo de presidenta a finales del pasado mes de junio, al tramitar los permisos para intentar hacer permanente la instalación junto al castillo, sede del Museo Internacional de Arte Contemporáneo (MIAC). El acuerdo inicial era una sesión gratuita durante una década después de que el Consejo de Administración de Centros Turísticos haya rechazado su compra.

Además, la presidenta criticó que La marea creciente es la segunda de las tres copias previstas de las esculturas que deCaires exhibió durante un mes en 2015 en el río Támesis, en Londres, y añadió que "Lanzarote tiene su propia identidad y no aporta nada el tratar de reciclar modelos". La pasada jornada insistió en que "no tenemos la voluntad ni la necesidad de imitar a ningún otro territorio. Al contrario, debemos seguir luchando por mantener la identidad de esta tierra y las singularidades que nos distinguen de otros destinos".

Corujo dijo "no entender la razón del interés mostrado por alguna formación política que se ha empeñado en centrar la agenda pública de Lanzarote en estos caballos en lugar de dedicar su tiempo y ganas a resolver los verdaderos problemas que afectan a los ciudadanos de esta isla".

El consejero de Centros Turísticos, Juan Félix Eugenio (PSOE), recordó que "estos trabajos se enmarcan en el conjunto de actuaciones que estamos ejecutando para devolver la identidad a la obra cultural y artística de César Manrique". El artista promovió la rehabilitación del castillo y la creación del Museo Internacional de Arte Contemporáneo (MIA) en su interior.

"Esconder una obra"

El artista deCaires intensificó la pasada jornada su enfado con el Cabildo por quitar su obra y acusó a los dos principales partidos del gobierno insular (PSOE y PP) de estar "más alineado con el general Franco y su censura del arte libre que con el medioambiente".

"Hoy el nuevo gobierno 'socialista' #PSOE con el apoyo de la derecha PP en #Lanzarote ha decidido censurar y retirar mi obra The Rising Tide", escribió deCaires en su cuenta de la red social Facebook.

El británico, autor también de las esculturas del Museo Atlántico, en Playa Blanca (Yaiza) arremetió contra socialistas y populares y les recriminó que "tras ser elegidos bajo la promesa de combatir el cambio climático, su primera acción" sea, precisamente, "retirar y esconder una obra directamente relacionada con la industria de los combustibles fósiles y el cambio climático".

Agradeció "a todas las personas que han protestado y hecho campaña contra esta abominacion". Confesó que le "entristece decir que intentarán cerrar y censurar el #MuseoAtlántico a continuación". Subrayó que "el arte público pertenece al público y vuestro nivel de apoyo ha sido realmente emotivo".

La campaña Dejen los caballos del castillo donde están había recogido en la plataforma de Internet change.org 2.008 firmas a las 20.25 horas de ayer, entre ellas las del expresidente del Cabildo, Pedro San Ginés, considerando que izar las esculturas es "un atentado al arte y encima un costo absurdo para los ciudadanos".

El Cabildo adjudicó en octubre a la empresa Dragados Canarios, por 23.385,60 euros, los trabajos realizados ayer en el mar y en tierra con las esculturas, obras que el Ayuntamiento de Arrecife quiere reubicar en la capital, idea que ha hecho llegar a deCaires.