Los trabajadores de la empresa Tratamiento Integral de Residuos Zonzamas, SA, reclaman tanto a la empresa como al Cabildo Insular de Lanzarote, propietario del Complejo Ambiental de Zonzamas, un cambio en su sistema de trabajo para proteger su salud y también la de sus familiares y evitar así "el alto riesgo" de contagio por coronavirus al que, según denuncian, se exponen cada día.
El representante de los 45 empleados, Cristian Serrano, propuso ayer que una opción sería enviar, sin abrir, las bolsas de los residuos sólidos urbanos procedentes de Lanzarote y La Graciosa que los camiones trasladan a diario a Zonzamas "a la celda de vertido para no tener contacto con residuos tóxicos". Asimismo, Serrano sugiere almacenar de forma temporal los materiales seleccionados en los contenedores de envases "por si pudiera haber también algún contagio".
El Cabildo de Lanzarote anunció el pasado lunes cambios en el protocolo de tratamiento de la basura en Zonzamas dentro de las medidas de protección a los trabajadores, con lo que el personal dejaría de romper las bolsas de basura para separar con precisión los restos orgánicos de los que no lo son "de cara a evitar contagios accidentales".
Sin embargo, Serrano reiteró su preocupación ya que "las bolsas de basura se siguen rompiendo con el tromel".
