El atropello mortal que tuvo lugar el 12 de junio de 2018 en Tiagua (Teguise) y que le costó la vida al músico Marco Antonio Murcia ya tiene fecha de juicio, aunque la vista no llegará a celebrarse. El acusado, Graciliano E.H., ha alcanzado un acuerdo de conformidad con la Fiscalía y el 24 de mayo solo comparecerá ante la Sección Sexta de la Audiencia Provincial para ratificarlo, confesando los hechos que se le imputan, informa el diario digital La Voz de Lanzarote.

En total, la Fiscalía pide para él tres años de cárcel, que son los que ha aceptado el acusado. De esos tres años, dos y medio corresponden a un delito de homicidio por imprudencia grave, por conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas, y medio año más por otro delito de omisión del deber de socorro. Y es que tras el accidente huyó del lugar, dejando abandonada a la víctima, que en ese momento aún estaba viva.

Según relata la Fiscalía en su escrito de acusación, los hechos ocurrieron sobre las 12.15 horas, cuando el acusado conducía por la carretera LZ-20 “con sus condiciones psicofísicas mermadas”, después de haber consumido alcohol, cocaína y anfetaminas. En ese momento, al atravesar el núcleo urbano de la Travesía Tiagua, arrolló a un hombre que estaba de pie junto a su vehículo. La víctima era un conocido músico y vecino de Lanzarote, miembro de la banda de rock Tribu, que se estaba mudando a su nueva casa. De hecho, se encontraba sacando sus pertenencias del coche, que estaba aparcado frente a la vivienda.

El suceso conmocionó en su día a la Isla, entre otras cosas por las circunstancias en las que se produjo el atropello. Y es que la víctima quedó atrapada en los bajos del coche y fue arrastrada 20 metros, hasta que el conductor se detuvo. Después, reanudó la marcha, dejando a la víctima tendida en la carretera. Al llegar la ambulancia seguía con vida y fue trasladado al Hospital Molina Orosa, aunque falleció poco después de ingresar, debido a la gravedad de las heridas.

Agresión a dos guardias civiles

En cuanto al conductor, la colaboración ciudadana permitió que la Policía Local diera con él tras el suceso, siendo localizado en su domicilio de La Santa, en Tinajo.

Según informaron entonces, también estaba presuntamente relacionado con una agresión a dos agentes de la Guardia Civil en julio del 2017 en La Santa, su lugar de residencia habitual.

Los guardias civiles habían ido al lugar tras recibir el aviso de una pelea callejera y a su llegada se encontraron una fiesta en un garaje y jóvenes durante una pelea, quienes al ver a los agentes la emprendieron a golpes con ellos en una agresión que el sindicato de la Benemérita definió de brutal y exigió todo el peso de la ley contra los agresores, entre ellos supuestamente el ahora procesado.

Después de su arresto tras el atropello mortal en junio de 2018, Graciliano E.H. fue sometido a pruebas de alcohol y drogas, arrojando un resultado de 0,88 mg de alcohol por litro de aire expirado y de 8 ng/ml en cocaína y anfetaminas en la prueba de saliva.

Además de los tres años de prisión, la Fiscalía pide que se le prohíba conducir vehículos a motor y ciclomotores durante tres años, tres meses y un día, lo que implica la pérdida de la vigencia de su permiso de conducir, que tendría que volver a obtener cumplido ese plazo.

Los familiares de la víctima han renunciado a la indemnización económica que pudiera corresponderles al argumenta que ya han sido resarcidos por la compañía aseguradora.

El 24 de mayo, con la ratificación de su confesión ante la Audiencia Provincial, se pone punto final a este trágico suceso.