Las organizaciones no gubernamentales (ONG) que tienen su sede en el centro social Nuestra Señora de Fátima, propiedad del Cabildo grancanario, se mostraron ayer satisfechas tras la reunión que mantuvieron con el máximo representante de la institución, José Miguel Bravo de Laguna, quien les aseguró que no les desalojarán de las instalaciones.
En la actualidad, 11 colectivos, entre los que se encuentran la Asociación de Diabéticos de Gran Canaria, la Asociación de Fibromialgia de Gran Canaria y la Asociación de Amigos contra el Sida, trabajan en el centro. Las organizaciones solicitaron al Cabildo mejorar la accesibilidad del centro, ya que algunos de los usuarios caminan con muletas o sillas de ruedas y repartir el espacio existente -la segunda planta está vacía- entre las ONG en función de los socios y de las necesidades de los usuarios.
"Nuestro proyecto es tener en un futuro un centro de día, si no es aquí será en otro sitio. Pero ahora necesitamos una sala para que el psicólogo atienda a los usuarios, ahora lo hace en el salón de juntas, y una sala de fisioterapia más amplia", indicó la presidenta de la Asociación de Esclerosis Múltiple, Lili Quintana, en relación con las necesidades de los 400 afectados que atiende la entidad.
El Cabildo de Gran Canaria se comprometió a estudiar la propuesta de las organizaciones de ayuda social y a reunirse por separado con ellas para atender sus necesidades.
