Un dictamen emitido el pasado 29 de junio por el Consejo Consultivo de Canarias ha impedido al Gobierno canario a aumentar a 16, como pretendía, el número de licencias de taxis explotadas por un solo titular en la capital.

El nuevo reglamento regional del servicio del taxi, recién aprobado, ha tenido que acatar las leyes estatales que establecen que una persona física sólo puede ser titular de una licencia, salvo que el municipio tenga más de 200.000 habitantes y más de 1.000 licencias. En ese caso, son cinco el máximo de licencias por persona.

El Gobierno canario quería abrir la puerta, en el caso de Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife, para que una persona pudiera ser titular del 1% de las licencias existentes en los municipios. En la capital grancanaria hay 1.600 licencias, lo que suponía que una sola persona podía ser titular de hasta 16 permisos, algo que al final no se ha podido implantar.

Tanto la Asociación de Titulares de Licencias de Autotaxi de Canarias (Atlac) como la Asociación de Asalariados denunciaron en su día que el Gobierno canario lo que pretendía con el nuevo reglamento del taxi era legalizar la situación irregular de los floteros. Ambos colectivos mostraron su satisfacción por el hecho de que el Gobierno haya dado marcha atrás, tras hacerle ver el Consejo Consultivo que no se podía saltar a la torera las leyes estatales. Los asalariados reclamaron que se tomen medidas de una vez contra "los 800 taxis que hay en manos de floteros en la capital grancanaria".