El patrullero de la Armada Española Relámpago (P-43) regresó ayer a su base del Arsenal Militar de Las Palmas, finalizando así su primera misión. La expedición de casi seis meses participó en la operación Atalanta contra la piratería en Somalia y en maniobras de seguridad marítima en países ribereños del África Occidental. Durante este tiempo este buque de acción marítima (BAM) tuvo la oportunidad de realizar misiones humanitarias al rescatar 68 inmigrantes a la deriva en el Golfo Pérsico y a cuatro tripulantes de un velero con el motor averiado junto a Cabo Verde.

El almirante comandante del Mando Naval de Canarias, Gregorio Bueno Murga, recibió sobre las 9.00 horas al Relámpago y a su dotación con el capitán de corbeta Antonio González del Tánago como comandante de la nave. Familiares del personal del P-43 se acercaron al muelle del Arsenal para darles una calurosa y emotiva bienvenida.

Bueno Murga subió al patrullero para felicitar a la marinería ordenada en cubierta por la "excelente" labor realizada contra la piratería en el Índico dentro de la operación Atalanta promovida por la Unión Europea y en la que en la Armada Española participa desde 2009.

Desde finales de agosto que partió de Rota (Cádiz) hasta el 10 de diciembre de 2012, el tercero de los cuatro BAM con base en Las palmas participó en la escolta de mercantes en el Océano Índico y en unos ejercicios en el Golfo Pérsico donde auxiliaron a los 68 inmigrantes a la deriva en un cayuco.

El Almirante del Mando Naval de Canarias resaltó que el Relámpago ha sido el primero de los buques de acción marítima que se ha desplegado en la operación que la Unión Europea desarrolla contra la piratería en aguas de Somalia "con resultados satisfactorios".

Durante el desarrollo de la operación Atalanta, el patrullero oceánico hizo escalas en los puertos de Al Jubail (Arabia Saudí), Doha (Qatar) y Phort Khalid (Emiratos Árabes) en los que llevó a cabo diversas actividades bilaterales y de apoyo a la industria naval nacional.

Al finalizar su estancia en aguas del cuerno de África, el Relámpago continuó con un periplo por el continente africano durante el cual ha visitado Maputo (Mozambique), Ciudad del Cabo (Sudáfrica), Walvis Bay (Namibia), Luanda (Angola), Duala (Camerún) Lagos (Nigeria) Praia (Cabo Verde) y Nuakchot.

En esta circunnavegación de África se llevaron a cabo diferentes actividades de colaboración con las marinas ribereñas realizando patrullas conjuntas con las armadas de Cabo Verde y Mauritania para reforzar su seguridad marítima.

En esos seis meses, el buque ha recorrido más de 28.000 millas con un total de 144 días de mar y visitado 15 puertos como parte de la colaboración de la Armada con la Secretaría General de Política de Defensa y el Ministerio de Asuntos Exteriores para contribuir al Plan de Diplomacia de Defensa.

Los países ribereños del África occidental y el Golfo de Guinea son zonas de creciente interés para España, que desarrolla desde 2011 actividades de cooperación de seguridad marítima con sus armadas, entre otros aspectos, para erradicar los casos de piratería que se están sucediendo en ese área cercana a Canarias.

Tras la alocución de Bueno Murga, la dotación del Relámpago desembarcó para festejar con su familias la vuelta tras un semestre fuera de casa viviéndose cariñosos y emocionantes encuentros sobre el muelle del Arsenal Militar de Las Palmas.

El capitán de corbeta y comandante del P-43 indicó que el comportamiento del barco había sido "magnífico" al responder a todas las expectativas puestas en este tipo de plataformas y consideró que los BAM serán "un éxito en la construcción naval de España". El patrullero oceánico Rayo saldrá la próxima semana desde el Arsenal para participar en la Atalanta.