Matías Gómez ha sido designado como nuevo comodoro del Real Club Náutico, que completa de este modo su nueva junta directiva. Gómez ya ocupó el mismo cargo entre 1998 y 2007. El comodoro es el cargo que asume la gestión deportiva de la entidad. En los primeros días de su mandato, el nuevo directivo ha anunciado que mantendrá distintas entrevistas con todas las personas de la entidad relacionadas con su área de gobierno, antes de tomar decisiones que determinen el rumbo que adoptará la entidad en el futuro.
El nombramiento del nuevo comodoro fue anunciado desde la web oficial del club, que difunde igualmente una pequeña entrevista en la que Gómez, médico urólogo de profesión, también confirmó que las reuniones las hará extensivas a los regatistas más notorios del Náutico, cuyo actual gobierno pretende mantener el alto nivel de excelencia que la institución ha demostrado en este apartado a lo largo de su historia.
Un equipo que comanda el actual presidente, Óscar Bergasa, escogido por los socios en las elecciones celebradas el pasado mes de noviembre, con 684 votos obtenidos. Una cifra con la que Bergasa pudo superar al resto de aspirantes: Alberto Cabré (621 votos). Javier Sánchez- Simón (565) y José Luis Cárdenes (344 ). Sin embargo, éstos habrían impulsado una moción de censura, la primera que puede tener lugar en la centenaria institución. Son "un grupo de socios", según se identifican, descontento con la reforma de los estatuas anunciada por el actual presidente, en una junta extraordinaria que se aplazó inicialmente, y que ahora se convoca para el próximo día 27 de este mes de marzo.
Este sería el colectivo que ha convocado para mañana miércoles una reunión informativa para dar cuenta a los miembros de la entidad de los efectos de este cambio estatutario.
Será un día de agenda agitada en el Náutico, porque otro "grupo de socios" también ha reservado espacio en el club para, tan sólo media hora después, informar sobre el mismo punto, en una maniobra que fuentes externas al club atribuyeron inicialmente a Bergasa, pero que fue negado por el actual equipo de presidencia. De hecho, en la convocatoria oficial que luce en la web del club, se lee al final que los convocantes son, en efecto, "un grupo de socios".
En todo caso, estas reuniones y las posiciones encontradas en el seno de la entidad es algo que se ha prolongado a lo largo del último año, en el que se han celebrado nada menos que dos elecciones a la presidencia. En las primeras, Juan Marrero Portugués ganó el cargo, para dimitir después en septiembre y abrir un nuevo proceso electoral que, pese a tener un desenlace en las urnas aún puede prolongarse con una moción de censura.
El detonante en esta ocasión puede ser la anunciada reforma de los estatutos de la entidad, que ha encontrado una fuerte reticencia en los sectores más próximos a los candidatos que perdieron la última convocatoria electoral en el Náutico. En el mejor de los casos, las tensiones no se calmarán hasta que acabe este mes de marzo.
