Un Agente de Movilidad de Las Palmas de Gran Canaria fue detenido ayer por agentes de la Policía Nacional por supuestamente haber cobrado 50 euros por retirar la denuncia de tráfico que él mismo había impuesto a un automovilista. Se trata de un agente de unos 30 años de edad, vecino de la capital grancanaria, contra el que se habían presentado dos denuncias, tanto en la Policía Local, como en el Cuerpo Nacional de Policía.

Los investigadores no descartan que este presunto delito de cobro por quitar una multa, que por lo general suelen ser de unos 200 euros, lo hubiese realizado en varias ocasiones, informaron ayer responsables del cuerpo municipal.

El detenido ya estaba siendo vigilado por las sospechas de que había cometido varias ilegalidades. Después de la existencia de dos denuncias presentadas, ya tomaban más fundamento los recelos. Este sospechoso, antes de formar parte de la plantilla del Ayuntamiento capitalino, había sido alumno de la Academia del Cuerpo Nacional de Policía, donde se vio implicado en una agresión. Tras terminar sus pretensiones de ser policía nacional, buscó la alternativa después para ser, al menos, auxiliar de la Policía Local. Ya en su puesto como agente de movilidad, durante poco más de un año, los compañeros denunciaron su carácter "polémico", indicaron compañeros de las tareas policiales por las calles de la capital grancanaria. En dos ocasiones, se le abrió un expediente en relación al desempeño de su trabajo y a sus derechos. En la primera, fue porque se desplazó y comenzó a trabajar en un lugar distinto al que se le había asignado previamente en el centro de la capital grancanaria.

El segundo expediente tuvo lugar porque, al parecer, realizó una consumición que hizo durante su jornada laboral en un restaurante en Vegueta que se negó a abonar. Este agente de movilidad argumentó al camarero que, a su entender, "nunca pagan los policías, ni ellos [agentes de movilidad]. Ante esta situación, los responsables del establecimiento alertaron al Ayuntamiento que tomó medidas contra el supuesto infractor. El auxiliar de la Policía Local, como todos los agentes de movilidad, tienen autoridad en materia de tráfico, pueden ordenar la circulación y poner multas. En otros asuntos, como intervenir en un supuesto caso de robo o de violencia, no está capacitado para hacerlo.