Es el segundo año consecutivo que reciben el premio Mahou LA PROVINCIA- La Opinión de Tenerife al mejor restaurante temático. ¿Sé lo esperaban? ¿Han hecho algo nuevo este año para que se repita el galardón?
No me lo esperaba para nada. Competía con dos restaurantes que para mí eran muy difíciles y además yo venía con el premio anterior, así que cuando me mencionaron la verdad es que me tuve que aguantar la emoción. Estamos muy orgullosos y bueno, nosotros hemos hecho lo de siempre, intentar que la gente se vaya satisfecha. Muchas veces las personas vienen con una idea de algo y a veces se la cambiamos, no porque queramos, sino para aconsejarles de que lo que van a comer estará mejor.
¿Ha introducido alguna novedad en la carta este año?
Sigue siendo igual. Nos basamos siempre en las carnes asadas y ni siquiera tenemos muchas salsas. Todo es natural. Podemos variar en ciertos frigoríficos, pero siempre tratando de mejorar. Las carnes son siempre de Uruguay y ahora estamos trabajando con una con la que verdaderamente estamos muy contentos y la gente también lo está.
¿Solo trabajan con carne de Uruguay o también tienen en su carta género canario?
Como siempre he dicho, las mejores chuletas o chuletones los he comido de aquí. Y la verdad es que no tenemos que envidiar nada, y digo envidiar porque después de 30 años me siento canario. También trabajo con género del norte, gallego, vasco, asturianos para buscar los chuletones, que es lo único que no viene de Sudamérica.
Ha habido casos de restaurantes donde se vende un tipo de carne por otra y al final lo pagan los comensales, por ejemplo, con la carne de buey. ¿Cómo se puede evitar ser engañado?
Lo de la carne de buey es un tema muy discutido, porque hay casos excepcionales y a veces puedo entenderlo o no. El buey supuestamente está prohibido en España porque es una castración de animal y aquí eso no está permitido, luego su comercialización tampoco lo estaría. Entonces tu puedes tener tu buey, matarlo y comercializarlo o meterlo en la carta de tu restaurante si es que lo tienes, pero normalmente todo lo que es buey viene de fuera, de todos los sitios de Europa menos de aquí. Aparte, los bueyes son animales más caros porque mantenerlos cuesta dinero y por lo tanto los precios de esas carnes son muy superiores. Por eso a veces se da vaca por buey.
Dada su experiencia, ¿a quién le gusta más la carne, a los uruguayos o a los canarios?
Bueno los canarios han cambiado muchísimo. Uno de los cortes que antes aquí no se escuchaba para nada era la entraña y hoy por hoy es más demandada por la gente. A los uruguayos por supuesto nos gusta mucho la carne, el pescado lo odiamos un poco [se ríe], aunque nos están involucrando un poco en el tema del pescado y quizá Canarias, como el resto de España, hay una gran variedad.
¿Cuáles son las carnes más demandadas aquí, además de las entrañas?
Antiguamente quizá más carnes sin grasas, pero hoy las piden con más sabor como por ejemplo el bife, que es lo que aquí llaman el lomo alto. Para mí este corte, cuando sale bien, no tiene nada que envidiarle a un chuletón. Es un corte muy suave con una textura un poquito grasa y yo lo considero algo intermediario entre las carnes sin grasas que son más tiernas y las que no tienen grasas que son más sabrosas.
Su familia tiene otro restaurante en Córdoba. ¿Tienen intención de seguir creciendo?
Hay muchos planes, pero hay que tener en cuenta el tema de la dedicación y el esfuerzo porque los restaurantes absorben mucho. Sí que tenemos ideas, que todavía no puedo plasmar, pero sí puedo decir que el ponerlo aquí sería como hacernos un poco de competencia entre nosotros. Así que hay ideas de ponerlo en otra isla pero no puedo todavía confirmar nada porque son solo eso, ideas y no tenemos nada seguro.
Y en este local, ¿hay alguna firma de las que lo decoran que tenga especial valor para usted?
Por aquí ha pasado mucha gente, actores, actrices, jugadores de fútbol, cantantes... Aunque para mí los tesoros en cuanto a las firmas son la de dos canarios universales como son Alfredo Kraus y César Manrique.
