La falta de un estudio actualizado sobre el tráfico existente en la GC-110 a su paso por el Guiniguada impide que se reduzca en esta zona la circulación de los vehículos privados a un solo carril por cada sentido. Es por ello que, según informó ayer el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Javier Doreste, está previsto que se "comience ya" con la elaboración de este análisis que tiene por objetivo contrarrestar el informe desfavorable que recibió el proyecto a principios de este año por parte del Gobierno de Canarias, a quien le pertenece la titularidad de la vía.
La medida llega dos años después de que el Consistorio capitalino plantease esta iniciativa para recuperar el espacio del barranco "como eje entre los barrios históricos de Vegueta y Triana". Así consta en el documento emitido por la Consejería de Obras Públicas, Transportes y Política Territorial del Ejecutivo regional que da respuesta negativa a la solicitud municipal de "convertir en vial urbano el ramal de la GC-110 que da acceso a la ciudad desde el centro de la Isla y que discurre en paralelo a la calle Juan de Quesada", con inicio en las proximidades del Puente de San Roque hasta el cruce con Obispo Codina.
Entre las causas alegadas por la Administración canaria para declarar desfavorable la propuesta se encuentran la necesidad de incluir una corrección de los estudios de movilidad y tráfico solicitada al Ayuntamiento en octubre de 2017, así como de tener contemplada por fases en el Plan General de Ordenación del Barranco Guiniguada la prolongación de la calle Rafael Cabrera. Además, el escrito recoge que "la rotonda planteada en el Pambaso deberá conectar las dos calzadas de la carretera del centro, de forma que permita el movimiento del tráfico proveniente de La Rehoyas y Miller Bajo hacia la Avenida Marítima" y exige que antes de ser aprobado definitivamente el Plan Especial se informe al área que dirige Pablo Rodríguez de aquellas propuestas que "definan la GC-110 en lo que a tráfico rodado y zonas de dominio público se refiere".
En el informe también se entiende que esta vía deberá contar con dos carriles por cada sentido, como hasta ahora. "Con lo cual no avanzaríamos porque seguiríamos teniendo la misma densidad de tráfico", señaló Doreste. Para cambiar esto, en la reunión que tuvo lugar a principios de semana entre las tres administraciones, se acordó realizar un nuevo estudio de movilidad de la citada zona que respalde la reducción a una sola vía para los vehículos privados en cada dirección "que se haría por fases", recalcó el concejal. Este análisis también tendrá en cuenta el cuarto carril en la Avenida Marítima, entre Lady Harimaguada y el principio de Rafael Cabrera, que el Ayuntamiento propone construir para absorber el tráfico del Guiniguada una vez que se lleve a cabo la reducción de la circulación de los coches a una sola vía en este tramo. Esta alternativa se ejecutará con dinero de la MetroGuagua en cuyo proyecto se contempla su creación en la nueva plataforma sobre el mar prevista para el nuevo transporte público.
"No estamos exigiendo la municipalización de entrada, mientras tanto queremos que nos dejen calmar el tráfico dejando un solo carril para ampliar aceras, ordenar aparcamientos y crear itinerarios peatonales y carril bici. Al menos, inicialmente, en la parte que da a la calle Juan de Quesada", apuntó. Y es que el edil aseveró que el planteamiento del estudio, que todavía no sabe "si saldrá a licitación o se hará por contrato menor", es "para ganar vinculación peatonal en los márgenes del barranco".