El campo de fútbol municipal de El Lasso lleva diez años abandonado. La mitad del terreno está cubierta por la maleza, pero los boquetes que dejan entrever la tierra bajo el césped artificial también se encuentran frente a la portería contraria. El Ayuntamiento proyecta "recuperar este espacio deportivo para todas las personas que practican fútbol en esta zona de la ciudad", según afirmó el alcalde, Augusto Hidalgo, ayer en la rueda de prensa en que presentó el plan, junto al concejal de Deportes Aridany Romero. La rehabilitación del campo y la construcción de vestuarios, gradas, aseos para el público y un puesto de información cuenta con un presupuesto de 2.081.276 euros.

El terreno de 5.700 metros cuadrados contará con un nuevo césped artificial y se le instalará una capa de asfalto, además de alumbrado y un sistema de riego y de recogida de aguas pluviales. El edificio que se encuentra tras una de las porterías será sustituido por cuatro vestuarios para los equipos y dos de árbitros, que podrán albergar a cuatro agrupaciones sin que "el uso de las instalaciones quede interrumpido por la salida o entrada de sus usuarios". En este espacio opuesto al barranco también se construirán nuevos almacenes para uso de los equipos, una enfermería, un cuarto de bombas y un aljibe de 40 metros cúbicos. Los asistentes a los partidos podrán verlos desde las gradas que se construirán sobre los almacenes. Por encima se encontrarán los aseos públicos y un punto de información y control.

El proyecto de rehabilitación del campo de fútbol del barrio de la capital se incluye dentro de la estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado para la transformación del Cono Sur de Las Palmas de Gran Canaria. El programa cuenta con una aportación de casi 15 millones de euros de Fondos de Desarrollo Europeos (Feder) y en total cuenta con una inversión de más de 17 millones hasta 2023.

El Instituto Municipal de Deportes realiza actuaciones desde 2015 dirigidas a mejorar los campos de la ciudad, "para garantizar que los deportistas puedan encontrar espacios adecuados y seguros para la práctica del fútbol". En esta línea, se licitó por separado su mantenimiento del de otras instalaciones deportivas el pasado junio por primera vez, con el fin de alargar la vida útil de los campos de 10 a 15 años, ofreciendo tres millones de euros para cuatro años.