"Los eventos multitudinarios no caben en Vegueta Triana". Así de tajante se mostró ayer en el pleno la presidenta de la asociación de vecinos de Triana San Telmo, Josefa Sánchez. "La cerveza, carnavales, los pinchos, se inventan la biblia en pasta". Mientras la dirigente vecinal defendió, a su juicio, los intereses del casco histórico, pocos minutos después la presidente de los empresarios de Vegueta, Olga Palacios, señaló que el fin de año de verano se celebra "hasta en Salamanca, con la de monumentos que tiene".
El pleno de ayer empezó con sorna desde el primer momento. "Perdón por llegar tarde", espetó Javier Amador, concejal de Ciudadanos, tras achacar su atraso a las obras del carril bici de Paseo de Chil, uno de los grandes protagonistas de la jornada. Los vecinos de esta calle aplaudieron con fuerza las intervenciones de los tres grupos de la oposición, mientras, el alcalde, Augusto Hidalgo, llamó la atención por lo bajo, "ni reproches, ni aplausos están permitidos".
Sus alabanzas continuaron con la intervención de su portavoz y desaparecieron con la intervención de César Acosta, representante de Las Palmas en Bici. "Estamos hipotecando nuestra sociedad con los coches", indicó. "Gente que no ha tenido problemas hasta ahora, que no es capaz de caminar 200 metros", continuó. Hasta afirmar que hay zonas con "verdaderos problemas" de movilidad que Paseo de Chil, como los riscos. "Molestaremos a los del lado cómodo", sentenció. Las ironías hicieron acto de presencia cuando el edil de Movilidad, José Eduardo Ramírez, señaló que ellos miden los carriles bici con "el sistema métrico y no con el taconeo", en referencia al vídeo en el que Nardy Barrios midió el carril con sus pies.
