El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha informado de que la obra de la pasarela Onda Atlántica --que unirá el muelle de Sanapú con la zona del mercado del Puerto y Las Canteras-- obligará al corte de un carril de la GC-1 en sentido norte desde las 21.30 horas de este jueves y hasta que terminen los trabajos durante la noche.

Los trabajos consistirán en el acondicionamiento del espacio en el que se colocará el extremo de la infraestructura que ubicará en el lado del muelle, ante la previsión de la llegada próxima de dos piezas procedentes de los astilleros de Sevilla.

En un comunicado, el Consistorio capitalino ha agregado que la colocación de estas estos dos nuevos tramos, que cruzarán la Avenida Marítima, se sumarán a las siete piezas que ya han sido instaladas.

Además, en el marco de los trabajos de preparación de esta zona, los operarios municipales trasplantarán una palmera que se encuentra en la mediana de la GC-1 para poder instalar la pasarela y garantizar el cuidado de este ejemplar de 12 metros, que será reubicado en el futuro nuevo espacio deportivo y de ocio de Lomo Blanco.

La pasarela se ha construido sobre una estructura metálica, revestida mediante chapa estructural de acero, junto a una losa de hormigón que sirve de base de cimentación de la estructura.

El viaducto, que cuenta con una superficie construida de 1.801 metros cuadrados, tiene 6,24 metros de ancho, de los cuales tres son transitables, y una altura de 3,12 metros. En el tramo de la plataforma que discurre sobre la GC-1, la pasarela alcanzará una altura de 5,5 metros.

Además, el Ayuntamiento instalará 100 metros cuadrados de paneles solares que generarán la electricidad necesaria de las luces led de bajo consumo que se colocarán a lo largo de la pasarela.

El desarrollo de la estructura se limita a cinco apoyos de contacto con el suelo, dos empotramientos sobre pilastras de hormigón y tres apoyos sobre soportes de hormigón en forma de 'Y', que se asemejan a las cunas que se usan para apoyar los barcos cuando están varados.

Finalmente, la superficie de la pasarela, por la que podrán circular personas y bicicletas, tendrá una pendiente del 6%, respetando las directrices de accesibilidad, mientras que la financiación de la obra, que tiene un presupuesto de adjudicación de 2.387.482 euros, ha sido consignada con cargo al Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan).