La baja tasa de reposición de las jubilaciones en la última década ha provocado que el Puerto reclame ampliar con urgencia las plantillas, tanto del departamento técnico, como de la Policía Portuaria. Esta es una de las principales preocupaciones que planteó el presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas, Luis Ibarra, en la reunión que mantuvo el pasado viernes con el representante de Puerto del Estado, Salvador de la Encina, y su homólogo de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, Carlos González. Se trata precisamente del primer encuentro de estas características que mantienen las tres administraciones públicas en busca de estrategias conjuntas para los recintos del Archipiélago.
Ibarra señala la necesidad "imperiosa" de avanzar en materia de Recursos Humanos, pues desde la Gran Recesión de 2008 el Puerto, al igual que el resto de administraciones públicas, ha contado con "muy poca" capacidad a la hora de renovar los puestos de aquellos trabajadores que se han ido jubilando. Precisamente, en la mañana de ayer, el hasta hace dos meses vicepresidente del Cabildo de Gran Canaria aprobó en la mesa conjunta de trabajo en Madrid la contratación en los próximos de siete plazas que vendrían a reponer las seis vacantes que dejaron aquellos que culminaron su ciclo laboral en 2018.
"Es la primera vez en 10 años que podemos contratar a más personas de las que se jubilan, pero aún así es solo una plaza de más y eso es claramente insuficiente para compensar los años anteriores", apunta Ibarra. Pero lo cierto es que la Autoridad Portuaria prevé que en este 2019 se jubilen un total de 14 trabajadores más, por lo que el nuevo acuerdo se quedaría ya corto. De esta manera, serían los ya mencionados departamentos técnicos y la Policía Portuaria los sectores de la administración que más se verían afectados por la escasez de personal.
Además, en este sentido, el fuerte envejecimiento de la plantilla también preocupa al presidente de los Puertos de Las Palmas, un fenómeno del que no escapan otras administraciones. Actualmente la edad media del personal está situada claramente por encima de los 50 años y, según Ibarra, es esencial "poder revertir" esta situación.
Durante la reunión entre las dos autoridades portuarias de Canarias y el ente dependiente del Ministerio de Fomento se pusieron sobre la mesa otros temas de "urgencia" bajo el punto de vista de Ibarra, pero también del tinerfeño González. Entre estos retos destaca la necesidad de invertir la tendencia a la baja del tráfico internacional de contenedores, con cifras negativas a lo largo del último año.
"Tenemos problemas similares, por lo que debemos trabajar en común ambas administraciones", señala Ibarra. Precisamente, Puertos del Estado ha resaltado en un comunicado de prensa que la intención de este encuentro ha sido "estudiar" junto a los nuevos presidentes las dos autoridades portuarias de las Islas "acciones estratégicas conjuntas" mediante las cuales sea posible revertir sus estadísticas.
"No van a estar solos en esta tarea de remontar las estadísticas portuarias, que en el fondo es luchar por la estabilidad de miles de puestos de trabajo directos, indirectos e inducidos en Canarias", apuntó de la Encina en la reunión, quien además se comprometió a visitar ambos puertos antes de terminar el año.
No obstante, el presidente de Puertos del Estado destacó que los recintos de Las Palmas y de Santa Cruz de Tenerife son singulares por su ubicación, con intereses comunes "a potenciar" y "puntas de lanza" en el comercio internacional entre Europa, África y América. Precisamente, el desarrollo de una serie de países del entorno del Archipiélago, de Mauritania a Senegal y las Guineas ha sido otro de los aspectos a tratar en este sentido.
Los tres organismos también acordaron la necesidad de desarrollar nuevas estrategias de desarrollo en los puertos de las islas no capitalinas, en el caso de Las Palmas, de Arrecife y Puerto del Rosario. Por parte de Ibarra, quien recientemente ha vuelto a presidir dicha institución después de un año de ausencia, defendió en la reunión la viabilidad del taller de mega yates en el muelle de Sanapú, pues este serviría "como atractivo para captar nuevos tráficos y diversificar la actividad portuaria". No obstante, el proyecto del centro de servicios para embarcaciones náuticas se encuentra paralizado.
