Alumnos de la Universidad Europea de Canarias junto con el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC) y la compañía Emalsa han desarrollado un estudio sobre el diseño e integración de un sistema fotovoltaico flotante en la planta desaladora de ósmosis inversa "Las Palmas III".

Según ha informado la compañía de aguas de Las Palmas de Gran Canaria, Emalsa, el estudio, que podría ser pionero en España, ha permitido dimensionar una planta solar de 1,53 megavatios sobre la lámina de agua de la balsa de captación de la planta desaladora, con una inversión cercana a los dos millones de euros.

Se trata de un trabajo de fin de máster (TFM) titulado "Viabilidad técnico-termodinámica y diseño de un campo solar fotovoltaico flotante en la captación de agua de mar de la desaladora Las Palmas III – Piedra Santa (LPGC)".

Los datos obtenidos incluyen la obtención de energía renovable cercana al 3 % del consumo anual de la planta desaladora, la reducción de la huella de carbono en 1.900 toneladas de CO2 al año y un ahorro anual en la facturación energética de la planta de 170.400.

Además, al quedar cubierta la superficie de la balsa de agua con los paneles solares se reduce la variación de la temperatura del agua de mar, lo que evita ajustes de operación con lo que mejora la eficiencia del proceso de ósmosis inversa y reduce el contenido en boro del agua desalada.

El proyecto se encuentra en la fase de estudio económico para poder abordar su posible ejecución a medio plazo, señala la nota.

La iniciativa se enmarca en las acciones del proyecto europeo "EERES4WATER", cofinanciado por el Programa Interreg Atlantic Area a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), que forma parte de la plataforma canaria Desal+ Living Lab, donde se realizan proyectos de innovación e investigación en el nexo agua desalada-energía.

Los estudiantes Raúl Santana Domínguez, Cristina Rodríguez Domínguez, Carlos Matos Sánchez, Alberto Daniel Rico Cano, Adrián Olmos Henríquez y Abraham Yeray Martín Sánchez ha sido los autores del estudio, tutorizado por Baltasar Peñate Suárez, jefe del Departamento de Agua del ITC y por Juan Diego López Arquillo, director de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Europea de Canarias.

La excelencia de los resultados de este trabajo ha sido valorada con la máxima puntuación y con la propuesta para la concesión de la Matrícula de Honor por unanimidad del Tribunal de la Universidad Europea de Canarias.