La caída del turismo por la pandemia ha dejado sin trabajo al 90% de los guías de Gran Canaria. Apenas un 10% de ellos sigue trabajando, aunque las excursiones no abundan, a base de reinventarse y han optado por atraer al público local. Algunos han aprovechado este parón obligado para formarse y dedicarse a la docencia y otras profesiones y la mayoría sobrevive a base de las escasas ayudas que reciben por el cese de actividad -son autónomos-, aunque hay un porcentaje cercano al 5% que no percibe nada. Todos esperan a que vuelva el turismo y han iniciado una campaña en las redes para garantizar la seguridad del destino de Gran Canaria y de sus rutas y excursiones, que han abandonado los lugares cerrados y se están desarrollando en espacios abiertos del casco histórico y en la naturaleza. Apuestan también por redescubrir el rico patrimonio natural que abunda en la isla, su flora, su fauna y las costumbres del entorno rural que aún perviven.

Algunos de los cruceristas que siguen llegando a la ciudad permiten a unos pocos guías como María Lezcano, mantener una pequeña parte de lo que fue su actividad antes del covid-19, pero la mayoría de los profesionales que siguen en activo están centrando su trabajo en excursiones y rutas relacionadas con la naturaleza, la cultura y la historia que atraigan al público local. Ya lo hacían, cuando el turismo venía y esa pluralidad de clientes les ha permitido ir escapando.

“Estamos viviendo de las rutas teatralizadas con la gente del país y de los cuatro gatitos que nos llegan”

Bruno J. Knudsen - Trip Gran Canaria

Se trata de excursiones de senderismo etnográfico, como las que diseña y coordina Rafa Molina; de rutas teatralizadas que ayudan a conocer en clave de comedia al escritor Benito Pérez Galdós o descubrir las leyendas y las historias olvidadas de la ciudad, impulsadas por Bruno J. Knudsen, o las excursiones ornitológicas que desarrolla Guillermo Bernal, en busca del preciado pinzón azul.

Después de años descubriendo e interpretando los encantos y peculiaridades de esta tierra a los foráneos, concentran ahora su oficio en la gente del país que, como no puede salir de la isla, ha vuelto sus ojos a su propia tierra. La mayoría de estas rutas ya existían desde antes de la pandemia para los turistas y también para la gente del país pero, salvo escasas excepciones, son ahora los canarios, quienes, cada vez en mayor número, muestran mayor interés por la tierra. Es el público local, reconocen, el que les permite salir adelante.

Bruno J. Knudsen Vizcaíno nunca fue el típico guía que esperaba a que lo llamara un tour operador a trabajar. Desde que empezó su carrera como guía le echó mucha iniciativa e imaginación a su profesión, creó la empresa Trip Gran Canaria y ha sido precisamente esa creatividad que le distingue lo que le ha permitido continuar trabajando con el público local, aunque la actividad, reconoce, es mucho menor que cuando venían los extranjeros.

“Tengo la suerte de que también trabajo con la gente de aquí y eso me permite seguir ahora en activo”

Rafa Molina - EtnoExperience

“En verano tuvimos algunos peninsulares, pero prácticamente no ha habido turismo desde marzo. Lo que han hecho muchos guías es darse de baja, algunos se han marchado incluso de la isla, otros están haciendo otras cosas, una gran parte está en paro y otra pequeña, como yo, estamos trabajando un poco y cobrando una ayuda. Yo siempre he ido a buscar al turista y ahora hacemos rutas teatralizadas con la gente del país”, explica Knudsen,cuya empresa hace también excursiones por el interior de la isla, entre ellas las rutas de las bodegas de Santa Brígida y el entorno de Bandama, con catas incluidas; o por los viñedos, queserías y cafetales del norte de la Isla. “La ruta del vino es mi especialidad”, avisa.

Son sus rutas teatralizadas en el casco histórico las que más éxito recaban, como la denominada Leyendas y Misterios de Vegueta, en la que aparecen hasta almas en pena de los condenados por la Inquisición y se habla de las historias más terribles y pavorosas, aquellas que tienen que ver con asesinatos, ahorcados, decapitaciones y misterios. Una puesta en escena muy atrayente, como las de los Cuentos de brujas o la de Benito Pérez Galdós, en las que el guía-narrador cuenta con el apoyo de varios actores.

Almas en pena

“A la gente le encanta lo que hacemos, cómo contamos las historias nuestras, de nuestras calles, de nuestros rincones, de los sucesos que han pasado. En una de nuestras rutas nos acompaña una actriz que encarna un alma en pena de la Vega de San José. De vez en cuando aparece un ahorcado y a la gente le encanta como lo relatamos. Ahora, con el coronavirus, se llena el cupo de las rutas”, asegura Knudsen, quien reconoce que de vez en cuando algún tour operador le manda turistas, cosa rara antes de la pandemia. “Son cuatro gatos que llegan, pequeños grupos que para ellos no son rentables y me llaman a mí para que los acople en mis excursiones. Y de eso estamos viviendo, de las rutas teatralizadas y de los cuatro gatitos que llegan y de los nómadas que también están viniendo a pasarse varios meses”, señala.

“El 90% de los guías está sin trabajo. Menos de un 10% tiene actividad, pero sus ingresos son mínimos ”

Marc Llorens - Portavoz de APIT

Otro profesional que continua trabajando es Rafa Molina, guía de Turismo, diseñador y organizador de rutas de senderismo etnográfico y dueño de la empresa EtnoExperience Canarias. “El trabajo no me falta. No es todo lo que debería ser, pero vamos saliendo. Cada vez viene más gente. El hecho de no poder salir de la isla está haciendo que la gente conozca su isla y los valores que tiene”, asegura Molina, quien avisa a los amantes del senderismo que ahora es el mejor momento para ir a Tenteniguada y la Caldera de los Marteles a disfrutar de un espectáculo único: la floración de los tajinastes azules. “A partir de esta semana va a estar espectacular la ruta del tajinaste”, anuncia. No en vano, la ruta del tajinaste azul es un clásico del senderismo en Gran Canaria.

“Tengo la suerte de que trabajo con el turismo y con la gente de aquí y eso me permite seguir en activo ahora. Estamos sobreviviendo gracias a la población local, que se ha dado cuenta de que no es lo mismo salir solo a caminar que tener a alguien que te explique y te cuente”.

Las rutas etnográficas de Molina consisten, más que en caminar, que también, en “dar a conocer a la gente el entorno rural, las bodegas, los viñedos, las fincas, cómo se hace el queso, la vida de los pastores a través de rutas de senderismo. Yo trabajo de forma personalizada con grupos de amigos, familias con niños o sin niños, en función de lo que pidan”.

Caminos de pastores

Entre sus numerosas rutas, destaca la de Caminos de pastores, a través de las sendas de los trashumantes, que incluye talleres de elaboración de quesos, y también los divinos paisajes de la Cumbre.

“A la gente le encanta como contamos las historia de nuestra ciudad, de nuestras calles y rincones”

Bruno J. Knudsen - Trip Gran Canaria

Por su parte, María Lezcano, es de las pocas que sigue haciendo excursiones, aunque menos de lo que quisiera, con los pocos cruceristas que llegan. “Hay quien dice que por el sistema de excursiones burbuja que están desarrollando los cruceros no están haciendo una contribución importante a la ciudad, pero sí que están aportando, porque está la logística, el aprovisionamiento, los guías. Obviamente, no es lo mismo que antes, pero todo se andará”, afirma Lezcano, quien destaca la seguridad de las rutas, con tests de antígenos a los guías incluidos. Espera como agua de mayo la vuelta de los cruceristas ingleses a mediados de este mes. Para dar una idea de como se ha reducido el trabajo, cuenta que en el último semestre de 2020 facturó un 70% menos de lo que ganó en el mismo periodo de 2019. Lezcano aprovechó el confinamiento para mejorar su formación y ahora compatibiliza las excursiones con la docencia en un instituto de Valsequillo. “Yo me he reinventando con el tema de la docencia. Me saqué la certificación de docente en el Servicio Canario de Empleo y he hecho un proyecto propio de apoyo formativo para el curso de Promoción Turística Local y Atención al Visitante. Aproveché mi experiencia, saqué la titulación y de alguna manera estoy contribuyendo a que otros profesionales aprendan de nuestra experiencia”, afirma.

Los pájaros

Por su parte, Guillermo Bernal, guía de Turismo realiza rutas especializadas en historia natural y arqueología que, bajo su punto de vista, son los “dos recursos más atractivos y únicos que tiene Canarias”. El pasado viernes realizó una ruta por El Confital con un grupo de alumnos jubilados de la ULPG y reconoce que la poca facturación que hace ahora proviene del público local. Dueño de la empresa Gran Canaria Sightseeing, Bernal hace rutas a la carta, personalizadas, con grupos pequeños, parejas o incluso una sola persona. Dentro de poco viene un ornitólogo de la Península a ver el pinzón azul, ese “tesoro que vive en Gran Canaria”. Esta es una de las rutas que hace. “Damos un paseo por el campo, mientras vamos a verlo y les hablo de la historia natural de la isla. Casi siempre vemos al pinzón. En cuatro años, sólo nos hemos ido cuatro veces sin verlo”, asegura.

“El no poder salir de la isla está haciendo que la gente se interese y conozca su tierra y sus valores”

Rafa Molina - EtnoExperience

En su opinión, son “las actividades de calidad con poca gente que ponen en valor las virtudes de la naturaleza y el paisaje las pocas están sobreviviendo en estos momentos. En mi caso siempre he tenido claro que la manera de devolver lo que yo he aprendido es tratar de que la gente de aquí valore y mantenga la empatía con el medio para que este se siga conservando”. Resalta que Canarias debe potenciar, de cara al turismo, lo que tiene de diferente y único. “Como dice Rafa Molina, cuando el turismo es traído a las islas, el que trae a ese turismo tiene la sartén por el mango y cuando deja de traerlo nos quedamos todos con el agua al cuello. En cambio, cuando el turismo es atraído con los valores y la belleza del lugar es ese sitio el que tiene la sartén por el mango y el turismo seguirá viniendo mientras perduren sus atractivos”, sostiene.

Marc Llorens ha echado mano de su otra profesión, la de periodista, y ahora colabora en una web y está diseñando sus propias excursiones, a través de personaltour.es, que serán privadas y personalizadas. Portavoz de la Asociación de Guías de Turismo de Gran Canaria (APIT), Llorens destaca que los casos de Lezcano, Molina, Bernal o Knudsen son minoría porque el 90% de los guías de Turismo no está trabajando “absolutamente nada. Hay algunos que trabajan una o dos veces a la semana, pero son muy pocos días y no es suficiente. María Lezcano percibe ahora un 70% menos y es uno de los mejores casos. El resto no tiene absolutamente nada y está cobrando la ayuda por cese de actividad. Hay gente que percibe 400 euros, otros algo más de 600 y unos pocos una cantidad mayor porque pagan más de autónomo. Esta situación nos permite trabajar, pero el problema es que no hay trabajo. Menos del 10% tienen actividad, pero sus ingresos son mínimos”.

“Estamos promoviendo excursiones en espacios abiertos y fomentando el senderismo”

Marc Llorens - Portavoz de APIT

En Gran Canaria hay en la actualidad unos 1.500 guías de turismo habilitados, de los cuales sólo unos cien estaban en activo antes de la pandemia. Ahora, además de no tener trabajo, están sumidos en una gran incertidumbre sobre su futuro. “Tememos que el turista, cuando vu elva, sólo quiera estar en un hotel y en espacios abiertos donde mantenga la distancia de seguridad. Por esa razón el pasado 21 de febrero iniciamos una campaña a nivel nacional, con el lema ‘Guía de Turismo, garantía de seguridad’, donde hacemos hincapié en la seguridad de las rutas turísticas. Estamos aplicando todos los protocolos de seguridad con una serie de medidas bien estudiadas, como el mantenimiento de la distancia de seguridad, el lavado de manos frecuente, uso de mascarillas fpp2 y la utilización de micrófonos”. Se está promoviendo, añade Llorens, que las excursiones se hagan “en espacios abiertos y estamos favoreciendo el senderismo, aprovechando el gran patrimonio natural que tiene la isla. Tenemos, por ejemplo, una flora que es única en el mundo y eso lo queremos poner en valor. Y queremos, sobre todo, dar un mensaje positivo porque Canarias es un destino turístico saludable”.

Los guías de Turismo han iniciado una campaña a nivel nacional para promover la seguridad del destino de Canarias y de las excursiones. El sector ha abandonado las rutas por el interior de museos u otras instituciones y está centrado su actividad en los espacios al aire libre de los cascos históricos. En la foto, una guía usa un micrófono para guardar la distancia de seguridad. |