El Gobierno de Canarias ha asegurado al partido animalista PACMA, en una resolución de la Dirección General de Lucha Contra el Cambio Climático y Medio Ambiente sobre la granja de pulpos, que "no existen argumentos para denegar la autorización de vertidos desde tierra al mar" solicitada por la promotora de la obra.

Según ha afirmado este martes PACMA en una nota de prensa, han recibido esta respuesta tras presentar alegaciones "por la incalculable cantidad de desechos que generará la futura granja de pulpos que prevé ubicarse en la isla de Gran Canaria".

¿Está a favor de la creación de una granja de pulpos?

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El documento presentado en mayo, que fue conjuntamente elaborado y firmado por un total de 110 organizaciones vinculadas al movimiento animalista, y pedía al Gobierno autonómico que repensara su postura.

Para la formación política animalista, la resolución es "desconcertante" y "en términos jurídicos incongruente", es decir, porque, a su juicio, "no hay correspondencia entre lo alegado y lo resuelto. Se limita a referencias genéricas y a decir que las alegaciones que se han formulado no tienen relación con los vertidos".

La empresa gallega Nueva Pescanova, promotora de la cría de los cefalópodos en cautividad, tiene previsto invertir unos 45 millones de euros en construir la que sería la primera granja de cría de pulpos para uso comercial en el mundo.

La compañía prevé contar con unas instalaciones de 52.000 metros cuadrados en el Puerto de Las Palmas y generar 300 puestos de trabajo para la producción de unas 3.000 toneladas de pulpo al año a partir de 2023.

"Aunque la resolución que hemos recibido de la Dirección General de Lucha Contra el Cambio Climático y Medio Ambiente indica que la autorización de vertidos está en suspenso por falta del preceptivo informe de compatibilidad con la demarcación marina canaria, sería sorprendente que finalmente este fuera desfavorable y no se autorizara el vertido", han manifestado desde el partido.

Por su parte, la abogada colaboradora de PACMA, Marta Muntada, ha explicado que este proyecto de acuicultura "debe de contar, al menos, con tres autorizaciones del gobierno canario: licencia de impacto ambiental; autorización de vertidos de tierra al mar y concesión de dominio público portuario".

Los argumentos del Partido Animalista se formularon en el procedimiento de autorización de vertidos de tierra al mar, que es donde ha habido trámite de exposición pública, ya que este permiso contempla la autorización a la empresa de poder verter residuos "de manera controlada”, ha añadido.

Desde el partido animalista han insistido en que "se desconoce absolutamente el impacto que puede tener el vertido ya que la propuesta de Nueva Pescanova no valora a fondo las consecuencias y sus riesgos, lo que ya sería motivo suficiente para denegar la autorización".

"Una vez en funcionamiento las consecuencias serían muy difíciles de revertir", añaden.

Así, Pacma ha expresado que las ONGs "han advertido que la cría en cautividad de pulpos no es la solución para la sobreexplotación de las poblaciones salvajes, sino la adecuada evaluación y gestión pesquera de sus poblaciones".

"Cuando decimos daños irreparables nos referimos a la destrucción del litoral, su fauna y vegetación, causando perjuicios en otros sectores tan importantes para Canarias como el turismo, la pesca, el medio ambiente y potencialmente a la salud humana, fauna y flora marina y el bienestar animal", ha apuntado el partido.

PACMA ha manifestado asimismo que los perjuicios del proyecto serían "sociales, ambientales, culturales, de salud pública y, en consecuencia, económicos generales para la población canaria".

En la resolución tampoco se señala en relación al impacto de vertidos en las zonas especialmente protegidas en Canarias y que, según PACMA, "estaría totalmente prohibido".