La Empresa Nacional del Gas (Enagás) anunció recientemente que Canarias contará con un buque de suministro de gas natural licuado (GNL) y BioGNL en el mar el próximo año 2025. 

En concreto será la filial de Enagás, Scale Gas, la encargada de impulsar la construcción de este barco, toda vez se confirmó hace dos semanas que contará con la financiación del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana del gobierno estatal, que ascenderá a un total de quince millones de euros.  

El proyecto Net Zero hive Canarias pertenece a una de las líneas estratégicas de la iniciativa Net Zero hive, que impulsa la propia Enagás cumpliendo con los compromisos de sostenibilidad, transición energética. Uno de los objetivos es contribuir en la descarbonización en el sector marítimo de las Islas. También se incluye dentro de la estrategia institucional LNGhive2, encabezada por Puertos del Estado, para el desarrollo de puntos de suministro de GNL, una de las obligaciones establecida en la directiva europea sobre la creación de una red de abastecimiento de combustibles alternativa para movilidad. 

Construcción en Gijón

El grupo Armón será el encargado de llevar a cabo la construcción de este tipo de buques en sus astilleros de Gijón. La compañía asturiana será pionera porque se trata del primer barco cisterna para desarrollar este tipo suministro en España. Dentro de los encargos solicitados para Enagás, Armón ya casi tiene construido el Haugesund Knutsen, que comenzará a operar en breve en el puerto de Barcelona. En 2023, se sumará otro buque de abastecimiento en Algeciras, mientras que el tercero de la cadena de montaje es el que se destinará a Canarias. 

El barco tendrá una capacidad de 12.500 metros cúbicos para realizar bunkering tanto de GNLcomo de BioGNL. Los depósitos que monta son de 5.000 metros cúbicos y 260 toneladas cada una, siendo fabricados en Italia. El buque se podrá adaptar para el suministro de amoniaco como combustible marino, lo que permitirá la utilización de hidrógeno como vector para la descarbonización del transporte. 

Durante los últimos años, el uso del GNLse ha ido consolidando como una alternativa más limpia que el fuelóleo o gasoil marino -que son los que están usando en la actualidad la mayoría de barcos-, ya que se alinea con los objetivos de descarbonización de la Unión Europea (UE). 

El proceso de suministro del GNL en los puertos se desarrolla tanto desde depósitos de combustible como camiones cisterna ubicados en el muelle. No obstante, los buques cisterna funcionan como centros de abastecimiento flotantes (bunkering ship to ship), de tal forma que el barco que necesita combustible se sitúa junto al barco cisterna y con un sistema de bombeo reposta sin verse en la obligación de atracar en puerto. 

Hacia la descarbonización

El proyecto Net Zero hive da continuación al CORE LNGas hive y tiene como objetivo promover el uso de infraestructuras en los puertos para fomentar fuentes energéticas más sostenibles, conforme a las políticas europeas para acelerar la reducción de emisiones del sector marítimo-portuario continental. 

El plan recoge la adaptación de las plantas de regasificación que se encuentran en los puertos españoles, así como en otras instalaciones del área de influencia portuaria para favorecer la producción de combustibles bajos en carbono como el hidrógeno, el BioGNL o el metano sintético. 

Este proyecto es un ejemplo más de la continua colaboración público-privada que favorece el impulso de combustibles descarbonizados como el BioGNL. 

Cabe señalar que el transporte marítimo es el tipo de movilidad más respetuosa con la protección del medio ambiente, con unas emisiones de gases de efecto invernadero por tonelada de mercancía transportada significativamente inferiores a las de otras forma de transporte. 

Clave en la transición energética

El gas natural licuado (GNL) es una energía que tendrá un papel clave en la transición energética para avanzar en alternativas de cero emisiones en el transporte marítimo, según señala la Unión Europea (UE) en su reglamento FuelEU Maritime, especialmente en un momento como el actual en el que no existe una tecnología motriz de cero emisiones económicamente viable. Los proyectos de suministro de combustibles bajos en carbono al transporte marítimo y otras aplicaciones en los puertos responden a los requerimientos de la normativa europea en este sentido, que se encuentra actualmente en revisión y de los correspondientes paquetes regulatorias Fit For 55 y FuelEU Maritime. Además, el transporte marítimo representa alrededor del 75% del comercio exterior y el 31% del comercio interior de la UE. | LP/DLP