Volvo CarsVolvo Cars ha dado un gran paso hacia su objetivo de alcanzar para 2025 la neutralidad climática en toda su red de fabricación al anunciar que la fábrica de Torslanda, en Suecia, se ha convertido en su primera planta de producción de vehículos con un efecto 100% nulo sobre el clima. La fábrica de Torslanda es la segunda de la red global de fabricación de la marca en alcanzar este hito, puesto que en 2018 ya alcanzó la neutralidad climática la planta de motores de Skövde, también situada en Suecia.

Para la compañía, el impacto sobre el clima de un centro de producción es completamente nulo cuando la electricidad y la calefacción que emplea no suponen ningún incremento neto de los gases de efecto invernadero emitidos a la atmósfera. Cabe destacar que la planta de Torslanda funciona con electricidad climáticamente neutra desde 2008, aunque ahora también dispone de un sistema de calefacción sin impacto sobre el clima. Ahora, la mitad del sistema de calefacción de la planta procede del biogás, mientras que la otra mitad se abastece mediante un sistema de calefacción urbana basada en el calor residual industrial.

En palabras de Javier Varela, responsable de operaciones industriales y calidad de Volvo Cars: "Convertir las instalaciones de Torslanda en nuestra primera fábrica de vehículos con neutralidad climática es un hito importante. Nos hemos comprometido a conseguir una red de fabricación sin efecto sobre el clima para 2025 y este logro es una muestra de nuestra determinación, ya que siempre trabajamos para reducir nuestro impacto sobre el medio ambiente".

Por otro lado, es importante destacar que la planta de Torslanda no sólo se ha convertido en una fábrica sin huella climática, sino que también reduce constantemente la cantidad de energía que emplea. De hecho, los objetivos de mejora de sus operaciones fijados durante 2020 permitieron un ahorro energético anual de casi 7.000 megavatios-hora (Mwh), lo que se equivale al consumo energético anual de más de 450 hogares suecos.

La fábrica tiene previsto seguir mejorando, en los próximos años, la eficiencia de los sistemas de iluminación y calefacción; lo que supondría un ahorro energético anual adicional de aproximadamente 20.000 MWh para 2023. Este ahorro energético forma parte de un objetivo ambicioso de Volvo Cars: reducir en un 30% el uso de energía por cada vehículo producido en su red de fabricación en 2025.

El objetivo de neutralidad climática de las fábricas de Volvo Cars forma parte del plan de la empresa a favor del clima, uno de los más ambiciosos del sector. El elemento clave del plan de la compañía es electrificar toda su gama de vehículos. No obstante, este plan no se limita a reducir las emisiones de escape mediante la electrificación, sino que también se ocupa de las emisiones de carbono de las operaciones generales de la compañía y su cadena de suministro, así como del reciclaje y la reutilización de los materiales mediante la adopción del modelo de economía circular.