Balance del horror. La UD finalizó a 14 puntos del UDplayoff
Ya todos lo sabemos y reconocemos. Reinó la frustración. Lo hemos intentado, generamos una gran esperanza, luchamos hasta que las matemáticas ya no nos servían. Somos críticos: no fuimos regulares y no hemos cumplido.
Málaga y UD, los dos mayores topes salariales -suman 44,4 millones-, se quedaron por el camino. Los ricos también lloran. Con el dinero y el talonario no basta...
Lógico. Se trata de una máxima de este deporte. La categoría está tremendamente igualada, de las más competidas del mundo. Se metieron en el playoff Mallorca y Albacete, con presupuestos bajos. Lo que cuenta es ser regulares. De los 22 equipos, veinte quieren subir. Sabemos el camino, que no es otro que ser constantes y sacrificarse desde el primer minuto de la pretemporada [arranca el 8 de julio]. El curso que viene será diferente. Le aseguro que es una gran reválida y daremos el nivel.
Usted batió al Dépor en Riazor. ¿Le da rabia ver al cuadro gallego en la gran final ante el Mallorca?
Pues no, cada uno acaba dónde merece. El balance final de 42 jornadas nunca miente. Ante el Málaga, por ejemplo, se logró un empate y victoria. Ante los gallegos, lo mismo (...) Pero no nos merecíamos estar en playoff. El Dépor se lo merece y el Málaga era el favorito. Pues ya sabemos lo que pasó. Accedió el sexto clasificado y ahora tiene opciones reales. No valen los pronósticos ni los millones. Cuenta el trabajo y el acierto.
En la 2014-15 se subió con un presupuesto de once millones. Y un tope salarial de cinco. Ahora se sale a competir con doce de informe contable y siete de tope.
No es un tema de presupuestos, se trata de compromiso. Ahí radica la fórmula del éxito. Debes tener esa pizca de suerte, que nos faltó ante el Zaragoza en casa. El éxito del grupo no tiene que ver con el presupuesto, es el compromiso y la igualdad. Tenemos que buscar eso, da igual el dinero... Creo más en la sintonía entre afición y proyecto. En la comunión entre club y plantel. Es el camino, deje de lado el tema económico. Eso es para los dirigentes
¿Llega la hora de la cantera? ¿Están preparados los Josep, Kirian, Cedrés, Segura o Carlos?
Hay una generación que lleva jugando un tiempo con el equipo profesional y lo hacen a un nivel prometedor. Son regulares, tienen ambición... Los Cristian, Josep, Kirian, Toni, Carlos...Hay materia prima, tenemos cantera. Debemos estar tranquilos. Contamos con un míster [Mel] que apuesta por los más jóvenes. Ahí están las estadísticas. No se corta.
Encadenó nueve partidos con Mel y fue de lo poco elogiable. Luego se lesionó. ¿Le vale?
Nadie puede decir que ha hecho una gran temporada. No hemos estado a la altura y punto. Estuve bastante sin jugar, lo hice con continuidad con Pepe Mel. Lo podía haber hecho mejor. Nadie puede decir 'me salvo de esto, yo hice aquello'. Nos vale de ejemplo esta decepción. La mejor lección.
David García y Momo
La entidad tiene la última palabra. Llevo muchos años jugando junto a ellos y me une una estrecha amistad. Lo único que deseo, sea lo que sea, es que se plasme de lo mejor manera. El club sabe que son casos especiales, se tratarán de una manera digna. Acorde a su recorrido. David García tiene el récord de partidos. Momo estuvo en los peores momentos. Saldrá todo bien. Ojalá sigan siendo mis compañeros.
Primera lección. Tachar la palabra ascenso. Recuperar la humildad y tatuárselo en el pecho.
Este equipo nunca ha dejado de ser humilde. Un equipo cuando desciende quiere subir rápido, ascender como sea. Quizás no es el camino adecuado. El pasado debe servir de ejemplo y estímulo. La UD irá partido a partido con tranquilidad, ilusión y entre todos, lo lograremos. Hay que estar todos juntos: afición y club.
¿Cómo se recupera a una grada que ha desertado?
Llevamos un año y medio sin tener un estilo de juego definido. A los canarios nos gusta jugar bien y ganar. Hay que dejarlo todo: ganar cada partido. Dar el máximo hasta el final y que la afición se sienta identificada con ese estilo.
Es el undécimo en la historia de la UD en partidos (284) y tiene a tiro ser el noveno...
No lo sabía, siempre he dicho que poder jugar con el equipo de tu tierra es un lujo, un orgullo y una responsabilidad. Cuando era pequeño fui al Insular y me quedé hipnotizado por este escudo. No hay nada más grande que vestir de amarillo. Quiero ampliarlo lo máximo, pero mi único registro es poner a la UD dónde se merece.
Vio a la afición del Málaga llorando con sus jugadores...
Es una Liga dura. Estrenamos Barranco Seco y trabajaremos para dar el máximo. Lograremos la meta desde la modestia.
