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Myriam Z. Albéniz

Desde la sala

Myriam Z. Albéniz

Familias distintas para un mismo objetivo

Familias distintas para un mismo objetivo

En pocos ámbitos como en el familiar se aprecia de modo más patente el gran cambio experimentado en las últimas décadas. El modelo denominado tradicional, compuesto por el padre, la madre y los hijos, presenta a día de hoy una notable evolución que ha dado lugar a familias reconstituidas, ensambladas, monoparentales, homoparentales y, más recientemente, creadas a través de la maternidad subrogada. Este fenómeno, al alza en los últimos años, no implica que deje de ser el núcleo central de las relaciones afectivas. Significa tan sólo que ya no se asienta únicamente sobre lazos biológicos, sino también de otra índole. Se trata, pues, de un universo interpersonal sometido a múltiples influencias y que reclama una legitimación social y una regulación legislativa apropiada.

Ser conocedores de esta diversidad y de los problemas que genera supone un primer paso imprescindible para acelerar las necesarias reformas legislativas llamadas a rellenar esas lagunas existentes que operan en detrimento de los menores que forman parte de estos nuevos patrones sobrevenidos. En ese sentido, considero que es deber de los juristas ejercer su profesión en pro de la ciudadanía y vivir la justicia de un modo cercano, sobre todo cuando se trata de velar por el bienestar de los más pequeños de nuestra sociedad. Abundando en la misma idea, las instituciones también han de responder con celeridad a estos imparables cambios sociales que nos afectan, ofreciendo respuestas tendentes a normalizar las diferencias en vez de crear grupos excluidos.

Al exponer el marco teórico sobre la concepción de la familia en la Constitución y en la jurisprudencia constitucional, no pocos profesionales han descrito a la actual familia española como «pequeña, cambiante y diversa, cuya regulación posee un carácter ético, puesto que atiende a la protección de los más vulnerables, primando el interés comunitario sobre el personal, pero con un sentido personal frente a lo patrimonial». Es un orden jurídico que ha pasado de jerárquico a horizontal y que supone nuevos retos sobre otras problemáticas sociales, como la dependencia, la igualdad de la mujer, la discapacidad o la violencia sobre la infancia.

El hecho cierto es que muchas personas acuden a los juzgados para solucionar varios conflictos que, todavía con la actual jurisprudencia, no son sencillos de resolver, aunque prevalece en todo caso el interés de los menores y la voluntad de mantenerles a salvo de las discrepancias. En mi opinión, una de las asignaturas pendientes más prioritaria es la de atribuir una posición adecuada a las nuevas parejas de los progenitores, así como a las figuras del padre y la madre no biológicos, en aras a abordar asuntos tan esenciales como el ejercicio de la autoridad parental, la delegación de funciones, la guarda en caso de enfermedad o el derecho de visitas, entre otras.

No obstante, esta coyuntura no requiere solamente de la intervención de profesionales del Derecho sino, en gran medida, de la participación y el buen criterio de otros especialistas que desarrollan su labor en campos relacionados con la infancia. Exigir una formación especializada en estas nuevas clases de vínculos y fomentar la figura de la Mediación Familiar para alcanzar soluciones más creativas, flexibles y tolerantes con las que convertir el entorno familiar en un universo enriquecedor y al margen del enquistamiento de roles, se alza como una vía muy aconsejable para restablecer la cordialidad y la convivencia.

Asimismo, resulta básico escuchar a todos los implicados en estos nuevos escenarios y, muy particularmente, a los propios niños y niñas, porque con sus testimonios pueden iluminar el camino hacia la mejor solución. Las familias cambian, pero los afectos deben permanecer. Por ello, resulta fundamental tener presente uno de sus primordiales objetivos comunes: constituir un espacio relacional que favorezca la capacidad de madurar hasta conseguir la máxima autonomía posible en el marco de un proceso que dura toda la vida.

www.loquemuchospiensanperopocosdicen.blogspot.com

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