Un reciente estudio ha relacionado la falta de sueño en los menores con el aumento de trastornos como la hiperactividad, así como la disminución del sistema inmunológico de los pequeños. Así lo aseguró ayer Sol Fortea, profesora de Psicología Evolutiva de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, durante una presentación sobre hábitos del sueño que tuvo lugar ayer en el Liceo Francés. Los expertos recomiendan, por tanto, que los niños duerman diez horas de media para reforzar sus defensas.

"El sueño es tan importante para la supervivencia como la alimentación, si los pequeños no duermen lo suficiente pueden tener problemas de salud, psicológicos y académicos", aclaró Fortea, que dio unas cifras escalofriantes. "En un estudio que se hizo en Estados Unidos entre la población adulta, pero que se puede extrapolar a la infantil, se dice que el riesgo de padecer un resfriado o un proceso gripal aumenta más del 300% y además, si no se descansa, el riesgo sube hasta el 550%".

Pero también se producen alteraciones en el aprendizaje y problemas de memoria, según adelantó la experta, que recomendó una correcta higiene del sueño, "que tiene que comenzar desde que los niños son bebés".

Para la psicóloga, los buenos hábitos deben llevarse a cabo "de lunes a lunes". De hecho, un niño que estaba ayer en la sala respondió, cuando le dijeron: "Bueno, y esta noche a dormir tempranito"; "No, que mañana es sábado".

"Hay que respetar los ritmos biológicos, de eso depende nuestra salud", concluyó.